Un avión de American Airlines que partió desde el aeropuerto Internacional de Ezeiza rumbo a Miami se declaró en emergencia por la presencia de humo en la cabina y debió regresar a Buenos Aires luego de haber recorrido unos 1.000 kilómetros. Llevaba 214 personas a bordo y estuvo casi 3 horas en el aire.
Se trata de un Boeing 787-9 que con la nominación AA908 había despegado a las 11.10 hacia la ciudad estadounidense. Cuando se encontraba entre el límite de la provincia de Formosa y Paraguay, el comandante de la aeronave tuvo que regresar a Ezeiza por el humo detectado en el avión, según informó Noticias Argentinas.
El vuelo aterrizó alrededor de las 13.45, luego de declararse en emergencia y seguir las normas de protocolo. Ninguno de los pasajeros registró inconvenientes y todos descendieron del avión por manga, esperando ahora una definición por parte de la empresa para la continuidad del vuelo, una vez que la aeronave haya sido inspeccionada y se determinen las causas del incidente.
Según un mapa difundido por Flight Radar 24, un sitio especializado en rastrear vuelos en vivo, se detectó la emergencia a las 12.39 cuando el avión transitaba la frontera entre Formosa y Paraguay, momento en el que se decidió volver al aeropuerto internacional de Ezeiza. El comandante del Boeing declaró la señal pan-pan medical por olor a humo en cabina, una clave de emergencia que significa la existencia de una urgencia a bordo.
Cómo fue el aterrizaje
En el vuelo había había 204 pasajeros y 10 tripulantes y en total estuvo en el aire 2 horas y 50 minutos, según trascendió. “A las 13:40, el Boeing 787-8 aterrizó en Ezeiza, siendo acompañado en todo momento por los servicios SEI y CONTER, los cuales actuaron con prontitud y de manera coordinada para lograr un operativo eficaz. No se registraron novedades en el aterrizaje de la aeronave. Los pasajeros descendieron de la misma sin inconvenientes, y el operativo se desarrolló en condiciones óptimas”, escribió la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) en un comunicado.
Éste no fue el único inconveniente que sufrió el vuelo, ya que originalmente debía despegar desde Buenos Aires el viernes a las 22:15 y arribar a su destino en Miami a las 6:30 de este sábado. "Me toco coordinar la asistencia ante la urgencia declarada por el American 908. Una tarea que exige tranquilidad, experiencia y profesionalismo. Cuando se subestima el trabajo público se cae en lugares vacíos que detrás de una estigmatización ponen en riesgo situaciones", publicó en redes sociales Marcelo Belelli, parte del personal terrestre de la ANAC en el aeropuerto de Ezeiza.