Los jardines cada vez tiene menos alumnos debido a la baja la natalidad en la Argentina y el crecimiento en la cantidad de cargos docentes, modificó significativamente la dinámica del nivel preescolar. En el Día de los Jardines de Infantes y de los y las Maestras Jardineras, que se celebra cada 28 de mayo, advierten sobre la necesidad de repensar las dinámicas en las salas y generar políticas que ayuden a la inserción laboral.
¿Cómo afecta la baja de la natalidad a las escuelas?
De acuerdo a datos del Sistema Integrado de Consulta de Datos e Indicadores Educativos (SICDIE) de 2023, en la Ciudad de Buenos Aires el nivel inicial privado cuenta con 8.873 cargos docentes y un promedio de 16,7 alumnos por sala. En comparación, en 2020 había 7.886 cargos y 19,4 alumnos por sala, mientras que en 2013 los cargos eran 6.066 y la media era de 20,7 estudiantes.
“La disminución del promedio de alumnos por curso es el resultado de un proceso multifactorial: por un lado, políticas públicas que fortalecieron la planta docente, con un aumento del 46,7% entre 2013 y 2023; y por otro, una marcada tendencia demográfica descendente", explicó Daniela Borlenghi, cofundadora de PickApply, una plataforma de búsqueda de trabajo para docentes.
Según el INDEC, entre 2010 y 2022 la tasa bruta de natalidad cayó de 17 a 12,5 nacimientos por mil habitantes, lo que representa una disminución del 26% en los nacimientos anuales. Esa caída de la natalidad lleva casi dos décadas. Solo en 2023, nacieron 460.902 bebés, un 7% menos que en 2022, y la tasa
de fecundidad bajó de 2,42 hijos por mujer en 2008 a 1,36 en 2023. Esta baja impacta directamente en la demanda de vacantes para el nivel inicial, especialmente en el sector privado. “Este doble fenómeno, la expansión de cargos docentes y la caída de la natalidad, explica que el promedio de estudiantes por sala haya descendido de 20,7 en 2013 a 16,7 en 2023”, agregó Borlenghi, licenciada en Educación.
¿Hay más docentes que alumnos?
A partir de datos propios, PickApply identificó que las instituciones privadas de CABA y el AMBA realizan, en promedio, tres búsquedas de personal docente de nivel inicial por año. En el 38,2% de los casos se busca una docente a cargo de sala, seguido por un 25,6% de búsquedas de docentes de inglés. El 73,6% de las vacantes son para jornada simple y el 65,3% para cargos titulares.
Los datos señalan que el nivel inicial continúa siendo uno de los más feminizados del sistema educativo y una porción importante de las maestras trabaja en más de una institución, debido a la modalidad de contratación por turnos, a la fragmentación de la oferta educativa y a los salarios insuficientes.
A todo esto, se suma un cambio en las demandas del aula. “Hoy los niños presentan nuevos desafíos y los grupos son cada vez más diversos. Las docentes deben adaptarse a nuevas corrientes pedagógicas, tecnologías y exigencias de formación continua, en un contexto donde no siempre se sienten reconocidas ni acompañadas por la comunidad educativa”, señaló Borlenghi.
La combinación de factores obliga a repensar las políticas de formación, inserción laboral y sostenibilidad de la educación inicial en la Argentina, para garantizar una oferta de calidad en una etapa clave del desarrollo infantil.