"Estoy destrozado". Así empieza el mensaje que publicó Fabián Correa, el padre de Thiago, el nene que murió baleado en La Matanza por un policía federal que fue víctima de un intento de asalto el miércoles por la noche, luego de confirmarse su fallecimiento por muerte cerebral el pasado viernes después de casi tres días en terapia intensiva luchando por su vida.
Fabián Correa se encontraba junto a Thiago en una parada de colectivo, a una cuadra del lugar donde el efectivo de la Policía Federal, Facundo Daniel Aguilar, abrió fuego contra cuatro delincuentes que intentaron robarle a él y a su madre. El hombre tenía a su hijo sobre sus hombros cuando una bala - de las 11 que fueron disparadas en 9 segundos por el policía- lo alcanzó por la espalda, impactándole en la cabeza al menor de siete años.
De acuerdo a su testimonio, en el momento que la bala lo alcanza, él llegó a poner a su hijo en sus brazos. "Pa" fue lo último que le dijo el niño antes de perder la conciencia, cuando el hombre desesperado gritó pidiendo ayuda, hasta que un auto de un desconocido se frenó y lo llevó al hospital.
"Me dejaste hijito mío, te amo y te voy amar toda la vida", continúa el posteo en Facebook de Correa, publicado ayer por la noche. "Ahora sos mi angelito, te amo, te amo hijo mío", dice sobre el cierre, en una publicación acompañada de una foto del niño en el club Defensores de La Tablada, el club donde jugaba al fútbol en su barrio.
Qué dijo la ministra Patricia Bullrich sobre el caso de Thiago Correa
"Los responsables directos de la situación que atraviesa Thiago son los delincuentes. Uno murió en la legitima defensa que realizó Facundo", sostuvo la ministra Bullrich en conferencia de prensa. Y agregó: "Son ellos los que generaron la acción delictiva. Salieron a la calle a matar".
En esa línea, la ministra adelantó que desde el ministerio pedirán el cambio de carátula de la causa y especificó: "Para nosotros, a los delincuentes que están hospitalizados y detenidos no solamente no se los debe involucrar en la carátula es robo, sino que es tentativa de homicidio porque ahí estaba Thiago".
El hecho ocurrió cuando el agente intentó repeler un intento de robo y efectuó al menos 11 disparos con su arma reglamentaria, uno de los cuales impactó en la cabeza del menor. A raíz del intercambio de disparos, uno de los ladrones murió y otros dos resultaron heridos. El agente involucrado, Aguilar Fajardo, quedó detenido bajo la acusación de "exceso en el uso de la legítima defensa".
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