La nena armada de Mendoza, atrincherada durante cinco horas: cómo es el protocolo, según los negociadores

Una alumna de 14 años entró con un arma a una escuela de La Paz, Mendoza, disparó al aire y se atrincheró durante cinco horas. La policía logró desarmarla sin heridos, pero el caso reabrió el debate sobre la seguridad escolar y el rol de los equipos negociadores.

11 de septiembre, 2025 | 08.30

La mañana del miércoles en la escuela Marcelino H. Blanco de La Paz, Mendoza, parecía la de una escena de película: una alumna de 14 años irrumpió con un arma de fuego, realizó tres disparos al aire y se encerró en el establecimiento. La tensión duró más de cinco horas hasta que finalmente el Grupo Especial de Seguridad (GES) y el Grupo de Resolución de Incidentes y Secuestros (GRIS) lograron desarmarla sin heridos.

El operativo incluyó la evacuación de alumnos, la contención de docentes y la intervención de mediadores especializados. La adolescente fue trasladada al hospital Santa Rosa, donde la atendieron equipos de psicólogos y psiquiatras. El fiscal Mariano Carbajal explicó que “la menor se encuentra bien”, aunque reconoció que el procedimiento fue “muy complejo”.

El protocolo escolar: qué hacer frente a un arma en el aula

La Dirección General de Escuelas de Mendoza tiene un protocolo específico para estos casos: si se identifica a un portador armado, se debe pedir que entregue el arma o abandone el lugar. En caso de negativa, corresponde llamar de inmediato al 911. La policía puede retirar el arma, pero no trasladar al alumno.

El procedimiento también exige avisar a la familia, registrar los hechos en actas y dar intervención a equipos interdisciplinarios para acompañar el impacto institucional. La prioridad es transmitir calma y resguardar la integridad de estudiantes y docentes, como ocurrió en La Paz gracias a la rápida acción de Bomberos y policías.

La nena armada en una escuela de Mendoza.

La mirada de los negociadores: entre la empatía y la información

El caso puso en primer plano el rol de los negociadores. Miguel Sileo, histórico mediador policial en el robo al Banco Río, explicó en diálogo con C5N que la clave está en generar un “espejo” con la persona atrincherada: “Uno tiene que lograr que se vea reflejada en vos. En este caso, sería más efectivo un negociador joven o una mujer, alguien con quien la chica pueda sentirse identificada”.

Sileo también subrayó que este no fue un arrebato espontáneo: “No es que ella se descontroló, agarró un caño y atacó. Fue algo premeditado, fue desde su casa con el arma”. Para el especialista, la información es vital: conocer el entorno familiar, los vínculos escolares y los posibles conflictos previos con docentes. “La escucha activa es fundamental. Hay que leer lo que la niña está diciendo entre líneas”, subrayó.

Una historia que abre interrogantes sobre la escuela y la violencia adolescente

Según trascendió en medios locales, la niña buscaba a una profesora de matemáticas por una discusión por una nota baja. Testimonios docentes relataron cómo la alumna mostró el arma y disparó al suelo mientras apuntaba sin llegar a herir. 

El caso de La Paz plantea una pregunta urgente: ¿qué herramientas tienen las instituciones para prevenir que los conflictos escolares deriven en tragedias? La respuesta, según coinciden especialistas, no puede limitarse al protocolo policial, sino que debe incluir políticas educativas, salud mental y acompañamiento familiar.