Equivale a 15 sentadillas: la postura de yoga que es ideal para endurecer los glúteos sin ir al gimnasio

Glúteos fuertes y tonificados: así podés practicar la postura de yoga que equivale a 15 sentadillas, fácil y apta para principiantes.

24 de octubre, 2025 | 16.32

Fortalecer los glúteos sin hacer sentadillas es posible a través del yoga. Si no te gusta a ir al gimnasio, o bien no tenés tiempo o dinero para hacerlo, practicar esta postura de yoga a diario te va a ayudar a tonificar el tren inferior. Además, podés hacerla desde casa y es apta para principiantes.

Las sentadillas son uno de los ejercicios más populares para hacer crecer los glúteos. Si bien para hacer crecer los músculos es fundamental levantar peso, es posible endurecerlos, darles forma y tonificarlos mediante el yoga.

Esperanza Moksha, instructora de yoga en David Lloyd Turó, explicó en diálogo con Vogue España que "esta postura fortalece piernas, zona abdominal y espalda, trabaja de forma global todo el cuerpo". Esta postura es Vrikshasana, conocida como la postura del árbol. Si se practica adecuadamente y activando los glúteos, puede equivaler entre 10 y 15 sentadillas.

Ayuda a trabajar la fuerza, el equilibrio y la concentración. Es por esto que la experta la comparó con las sentadillas: "Este ejercicio incluso puede subirse de intensidad poniendo un soporte de equilibrio como la semiesfera o el disco debajo del pie de apoyo. Y para trabajar la parte de rotación externa se puede hacer en equilibrio elevación de pierna lateralmente”, señaló.

Cómo practicar Vrikshasana, la postura del árbol que fortalece los glúteos

Para hacer la postura del árbol, ponete de pie en uno de tus dos pies y apoyá la planta del otro sobre tu muslo contrario, formando una especie de 4. Apoyá una palma de la mano contra la otra, como si estuvieses rezando.

Postura del árbol para fortalecer los glúteos.

Hacé lo mismo con el pie contrario. Mantenete así durante algunos segundos, alfojá y repetí lo mismo, 3 veces con cada lado en total. Asegurate de contraer los glúteos durante todo el ejercicio para que sea más efectivo.

Los beneficios de esta postura

Según Moksha, esta postura activa los cuádriceps, isquiotibiales y gemelos de la pierna de apoyo. Además, fortalece los tobillos y pies, entrenando el equilibrio. De manera indirecta, la zona abdominal y lumbar también se ven favorecidas, ya que trabajan para mantener la columna erguida.

Los hombros y brazos también están activos durante esta postura. "La pierna elevada también tiene un papel activo aunque un poco más sutil. Han de activarse los aductores para poder hacer la rotación externa de cadera y colocar el pie en el muslo o la pantorrilla. Esta rotación de cadera trabaja glúteo mayor, piriforme y otros rotadores profundos de la articulación", suma la experta.