Una nueva tendencia que dio que hablar en redes sociales es el uso de sal en el lavarropas. Este truco casero, que puede parecer un poco raro al principio, fue aclamado por miles de usuarios que lo consideraron una solución eficaz para cuidar las prendas y mantener en buenas condiciones el electrodoméstico.
A medida que se difundieron los secretos de limpieza, la sal se destacó como un ingrediente accesible con muchos beneficios. Los especialistas en limpieza explicaron que añadir sal al lavado ayuda a fijar los colores de las prendas, evita que se destiñan y suaviza los tejidos de manera natural.
Además, en el caso de la sal gruesa, tiene la sorprendente capacidad de disminuir la dureza del agua, lo que impide la acumulación de cal en el tambor del lavarropas. Esto no solo mejora la eficacia del lavado, sino que también contribuye a alargar la vida útil del aparato.
Este truco se puede adaptar según lo que se necesita. Si buscas conservar el color de la ropa oscura, lo mejor es colocar una taza de sal fina directamente en el tambor, usar agua fría y un detergente suave. Esta mezcla ayuda a mantener los colores intensos y evita que se destiñan.
Por otro lado, si tu objetivo es limpiar el lavarropas y prevenir la cal, lo aconsejable es hacer un lavado vacío con un kilo de sal gruesa y agua caliente. Este procedimiento limpia a fondo el tambor y mejora el funcionamiento general del electrodoméstico.
El ingrediente clave para la limpieza del hogar
Las cáscaras de huevo, esas que normalmente tiramos sin pensar, se convirtieron en un gran aliado en la cocina. Según los usuarios de las redes sociales, mezclar detergente con estas cáscaras hizo maravillas a la hora de lavar los platos. La efectividad de este truco casero radica en cómo las cáscaras limpiaron superficies duras, como ollas y sartenes.
Al combinar cáscaras trituradas con un poco de detergente, se logra una mezcla capaz de dejar los platos relucientes y más limpios que nunca. Sin embargo, es clave tener cuidado con los materiales que se limpian: “es importante que los productos no sean de materiales como cristal para no dañar el brillo de la superficie”, aclararon los expertos en limpieza.
Además de ser una opción ecológica, ya que reutilizamos un producto que de otro modo iría a la basura, la cáscara de huevo también da una mano en otras tareas domésticas. Con un poco de creatividad, se transformó en un limpiador casero eficaz y, con su alta concentración de calcio y su textura abrasiva, ayuda a blanquear la ropa y hasta desatapar cañerías.
Si te animás a probar esta mezcla, aquí van los pasos: primero, triturá las cáscaras en un bowl pequeño hasta que queden bien finitas. Después, agregá un chorrito de detergente y mezclá bien. Aplicá la mezcla en la superficie que quieras limpiar y frotá suavemente con un trapo o esponja. Por último, enjuagá con agua tibia y secá con un trapo limpio, o dejá que se seque al aire.
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