Como París, pero en Buenos Aires: la calle francesa que fue la más elegante de Retiro y que ya no existe

La historia de Pasaje Sevaer, el rincón de Buenos Aires más elegante y bohemio de todo Retiro, y que supo ser el hogar de muchos artistas.

28 de octubre, 2025 | 12.37

Hace 45 años existía una calle en Buenos Aires que evocaba la arquitectura francesa, y que hasta su demolición, era la más elegante de todo Retiro. La historia de Buenos Aires está llena de rincones y pasajes que ya no existen, pero que dejaron una huella en la memoria de los ciudadanos que llegaron a verlas.

Una de ellos fue el Pasaje Seaver, una calle pequeña ubicada en el barrio de Retiro que, hasta 1978, año en el que desapareció, fue un ícono de la vida nocturna en Buenos Aires. Al verlo en una foto, cualquiera podría confundirla con una calle de París.

Cómo es el Pasaje Seaver

El Pasaje Seaver era una calle sin salida de apenas 135 metros de largo, ubicada entre lo que hoy son las avenidas de Libertador, Carlos Pellegrini, Cerrito y Posadas.

Con sus casas de arquitectura europea y sus faroles de hierro, hasta el día de hoy es recordada como la calle más francesa de Buenos Aires. Al llegar a su punto final, había una escalinata de piedra icónica de la ciudad, admirada tanto por porteños como por turistas. 

Historia de Pasaje Seaver: cómo surgió y su desaparición del mapa

Pasaje Seaver surgió en el siglo XIX bajo el nombre de “Artes Segunda”, una zona de depósitos y caballerizas. Recién en 1893 recibió su nombre actual en homenaje al marino Benjamín Franklin Seaver, quien luchó junto a Guillermo Brown.

Con el correr de los años, el pasaje se transformó en un refugio cultural. Sus fachadas se embellecieron, abrieron cafés y clubes nocturnos y varios artistas instalaron allí sus talleres.

Pasaje Sevaer, el rincón parisino de Buenos Aires.

En 1978 fue demolido para extender la Avenida 9 de Julio hacia el norte, y de esta forma, desapareció junto con la Plaza Tedín. Sin embargo, está guardado en la memoria de los porteños y fue eternizado en fotos, libros y películas.

Pasaje Seaver, el hogar de los artistas y un recuerdo en el cine y la literatura

A pesar de que desapareció hace 45 años, hasta el día de hoy muchos vecinos la recuerdan por su aire bohemio. Incluso, llamó la atención de muchos directores de cine argentino, quienes grabaron allí sus películas entre los años 50 y 70. 

Pasaje Sevaer, el rincón parisino de Buenos Aires.

Algunas de ellas fueron La niña del gato (1953), Graciela (1956), El rufián (1961), Los hampones (1961), Bettina (1965), Psique y sexo (1965), Mosaico (1970), Así es Buenos Aires (1971), Mi novia el… (1975) y Las turistas quieren guerra (1977), entre muchas otras. Incluso escritores también hicieron alusión a este pasaje en sus obras: Ernesto Sábato en El túnel, y Eduardo Mallea en La ciudad junto al río inmovil.

También fue hogar y taller de muchos artistas, como de la pintora libanesa Bibi Zogbé, la bailarina rusa Ekaterina de Galanta, el escultor Leguizamón Pondal, la escultora Ana Vieyra de Pallavicino, el poeta Alfredo Martínez Howard, el novelista Jorge Masciángioli, entre otros.