El presidente Donald Trump no recomendará nombrar un fiscal especial en el caso de Jeffrey Epstein, dijo el jueves su secretaria de prensa, en un escenario en que algunos de sus partidarios presionan por la medida y hay un creciente escrutinio público sobre las conexiones del delincuente sexual convicto con figuras poderosas.
"El presidente no recomendaría un fiscal especial en el caso Epstein. Así es como él se siente", dijo a periodistas la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
Leavitt dijo que Trump ya había ordenado al Departamento de Justicia y a la fiscal general Pam Bondi que llevaran a cabo una "revisión exhaustiva de todos los archivos", desestimó el nuevo interés en Epstein como de índole política y acusó a los demócratas de ignorar el asunto durante su permanencia en el poder.
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Epstein, un rico financiero, se enfrentaba a cargos federales por tráfico sexual de menores cuando murió por suicidio en la cárcel en 2019. Se había declarado inocente y el caso fue sobreseído tras su muerte.
El asunto volvió a las noticias la semana pasada después de que el Gobierno de Trump se retractó de su promesa de publicar documentos que previamente había sugerido que ofrecerían importantes revelaciones sobre Epstein y su presunta clientela.
La marcha atrás ha enfurecido a algunos de los seguidores más leales de Trump.
El miércoles, Trump atacó a sus partidarios que han sido críticos con el manejo que su Gobierno ha tenido del caso Epstein.
En Truth Social, Trump dijo: "Dejen que estos debiluchos sigan adelante y hagan el trabajo de los demócratas, ni se les ocurra hablar de nuestro éxito increíble y sin precedentes, ¡porque ya no quiero su apoyo!".
(Reportaje de Steve Holland y Nandita Bose en Washington; edición en español de Javier López de Lérida)
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