La presencia de una habitación desordenada puede traducirse en la falta de tiempo que una persona pueda llegar a tener para acomodar cada cosa en su lugar. Sin embargo, la respuesta podría ser otra en caso de que este estado se mantenga presente con el paso de los días. Algo que es posible combatir de varias maneras y con métodos de limpieza bastante prácticos.
Una habitación desordenada se puede ser producto de varias causas, como la presencia de ropa fuera de lugar, objetos que se removieron de estanterías y que haya basura sobre el escritorio como en el suelo. En algunos casos, una persona no cuenta con el tiempo suficiente y decide acomodar a las prendas de vestir en una parte que con el paso de los días se van acumulando de gran manera.
"Que día más aburrido, no tengo nada que hacer...", expresó Tomiezequiel15, como figura su usuario de X (Ex Twitter). La fotografía presenta a una persona sobre su cama, mirando el celular y con un cuarto que dispone de una estado bastante lamentable. No solo hay objetos desparramados por varias partes, sino que hay presencia de una cantidad considerable de basura.
Este desorden puede ser considerado producto de un cuadro de estrés y/o ansiedad que genera que la tarea de ordenar sea considerada como abrumante. También es una manera de procrastinar que implica dejar determinadas tareas que son pequeñas para después y que se acumulan con el paso de los días. Algunos profesionales señalan la presencia de un síntoma vinculado con el consumo excesivo. Una necesidad de guardar cosas que contribuyen a un contexto con cierta falta de orden.
¿Cómo establecer un orden?
La Inteligencia Artificial, como es Gemini de Google, puede ser de gran utilidad para aplicar pequeños métodos de limpieza que no demanden un gasto de minutos y que a la larga generan las condiciones necesarias para que una habitación presente una imagen impecable. Además de que reducirá de forma considerable las tareas a realizar al momento de llevar a cabo un proceso extenso.
- La regla de los 5 minutos: si una tarea implica menos del tiempo señalado, se la debe hacer en el instante y no pensar tanto ella. Esto aplica como colocar un libro en una estantería o guardar ropa en el ropero.
- Rutina diaria: se puede establecer una franja de 10 minutos en la que una persona se dedique a guardar cosas del hogar o de su habitación. Si se prolonga con el paso de los días va a dar ventajas más que considerables.
- Evitar puntos ciegos: es necesario detectar espacios dentro de una habitación en donde se acumulen cosas con el paso de los días. Reconocerlo provocará que cada prenda u objeto quede guardado de manera instantánea.
Otro consejo que se desprende es que es importante desarrollar el hábito de guardar de manera inmediata cada una de las cosas después de que son utilizadas. No solo se evita que se produzca un desorden, sino que es una actividad demandará pocos minutos en ejecutarla. De esta forma, no hay acumulación y se está en presencia de un ambiente ordenado que transmitirá sensación de paz.