Esta semana, los príncipes de Gales, William y Kate, emocionaron a sus seguidores al compartir una dulce fotografía por el 43 cumpleaños del príncipe. En la imagen, William apareció sentado rodeado de cuatro adorables cachorritos de raza cocker spaniel. El mensaje que acompañó la postal dijo: "¡Feliz cumpleaños! Con amor, C, G, C, L, Orla y los cachorritos", firmado con las iniciales de Kate y sus tres hijos, George, Charlotte y Louis.
La gran pregunta que se hicieron todos los fans reales fue: ¿Qué pasará con esos adorables perritos? Según la periodista Rebecca English, los príncipes ya tomaron una decisión. Y, sin dudas, los pequeños de la casa están más que felices. Se supo que quieren quedarse con uno de los cachorros, lo que seguramente alegra a George, Charlotte y Louis, quienes aman tener animales en casa.
"Esa es una de las razones por las que decidieron criar a su querida spaniel Orla", explicó English. "Fue algo emocionante para los niños, y parece que planean quedarse con uno de los cachorros". Orla, la cocker spaniel que llegó hace cinco años a la familia real, se convirtió en una integrante más del hogar.
Fue un regalo de James Middleton, el hermano de Kate, quien pensó que uno de los cachorros de Luna, su mascota, haría muy felices a sus sobrinos. Y no se equivocó. Desde que se unió a la familia, los príncipes compartieron varias fotos de Orla y contaron lo cariñosa que es, llegando incluso a dormir con ellos en la cama, como reveló William en una charla informal.
La conexión de la pareja real con los animales
No es la primera vez que los príncipes tienen un perro en su vida familiar. Antes de Orla, compartieron sus días con Lupo, otro cocker spaniel de su familia. Nació de una camada que tuvo Ella, el perro de Carole y Michael Middleton. Sin embargo, en 2020, Kate y William anunciaron con tristeza su fallecimiento: "Estuvo en el corazón de nuestra familia durante los últimos nueve años y le echaremos mucho de menos", manifestaron entonces.
La pasión por los perros es una característica muy marcada en la familia real británica. La reina Isabel II, sin ir más lejos, fue conocida por su amor hacia sus corgis. Tras su partida en 2022, el príncipe Andrés y Sarah Ferguson adoptaron a Sandy y Muick, para continuar el legado canino. Actualmente, los reyes Carlos y Camila también tienen varias mascotas: un Jack Russell Terrier llamado Bluebell y dos perros adoptados, Moley y Snuff.
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Por su parte, los duques de Edimburgo comparten su hogar con dos labradores, Teal y Teasel, además de un cocker spaniel de trabajo. Por último, no faltan los perros en el hogar de los duques de Sussex, quienes son orgullosos dueños de un labrador negro llamado Pula y una beagle rescatada llamada Mamma Mia.