El tiramisú es uno de los clásicos de los postres en Argentina y una nutricionista compartió en sus redes sociales una receta saludable pero con el mismo sabor. En este plato los protagonistas son el café y la característica cremosidad y acidez del queso crema, presentes también en la versión fit.
Reducir el consumo de azúcar y harinas refinadas es importante porque estos ingredientes, al ser de rápida absorción, elevan bruscamente los niveles de glucosa en sangre, lo que puede favorecer el aumento de peso, la resistencia a la insulina y el desarrollo de enfermedades como la diabetes tipo 2; por ese motivo, está bueno recudir el consumo de esos ingredientes con recetas como la de este tiramisú.
Además, este tipo de recetas aporta calorías vacías, es decir, energía sin nutrientes esenciales como fibra, vitaminas o minerales. Al reemplazarlos por opciones integrales y endulzantes naturales en menor cantidad, se mejora la digestión, se mantiene una energía más estable durante el día y se protege la salud cardiovascular a largo plazo.
Receta de tiramisú sin harina ni azúcar en vaso
Ingredientes
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1 taza de leche.
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3 cucharadas de avena.
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1 cdita de café instantáneo.
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Edulcorante.
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Esencia de vainilla.
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Yogur natural o queso untable endulzado.
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Chocolate amargo rallado.
Paso a paso
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En una cacerolita colocar la leche, la avena, el café instantáneo, el edulcorante y la esencia de vainilla, mezclar y cocinar por un ratito hasta que rompa el hervor.
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Una vez que la avena se enfrió y tomó consistencia, rellenar una copita alternando la preparación con yogur natural o queso untable de forma alternada.
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Para terminar agregar un poco de chocolate amargo rallado.
Receta de tiramisú clásico
Ingredientes
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300 g de vainillas.
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400 g de queso mascarpone.
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3 yemas de huevo.
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100 g de azúcar.
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200 ml de café fuerte (preferentemente espresso), frío.
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2 cucharadas de licor (opcional: cognac, ron o amaretto).
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Cacao amargo en polvo para espolvorear.
Paso a paso
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Preparar el café y dejarlo enfriar. Si se usa licor, mezclarlo con el café.
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Batir las yemas con el azúcar hasta que la mezcla se aclare y quede espumosa.
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Agregar el mascarpone de a poco e integrar suavemente hasta obtener una crema homogénea.
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Mojar rápidamente las vainillas en el café (sin empaparlas de más para que no se deshagan).
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Colocar una capa de vainillas en la base de una fuente o molde.
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Cubrir con una capa de crema de mascarpone.
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Repetir capas hasta terminar, finalizando con crema.
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Llevar a la heladera al menos 4 horas (ideal de un día para otro).
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Antes de servir, espolvorear la superficie con cacao amargo.