Joaquín Furriel reveló el síndrome que padece: "Desde los 16 años"

El famoso actor, Joaquín Furriel, contó el problema de salud que tiene y con el que lucha desde los 16 años sin cura.

22 de julio, 2025 | 19.01

Joaquín Furriel abrió su corazón y reveló cuál es el problema de salud que padece. El reconocido actor brindó detalles de este síndrome que lo acompaña desde los 16 años y contó cómo aprendió a vivir con él, el tratamiento que tiene que seguir y cuáles son las limitaciones con las que se encuentra.

Precisamente, el artista padece de síndrome de Gilbert, una condición benigna que afecta a su sistema digestivo, más precisamente al hígado. "Soy consciente de lo que como desde los 16 años porque tengo una enzima que no segrego, que es la enfermedad de Gilberten mi hígado", explicó el actor en una reciente entrevista.

En este marco, sumó: "Sé lo que me hace mal al hígado, ya tengo una conciencia alimentaria, qué comer y qué no comer, o qué significa cada comida". Asimismo, confesó: "Ahora, cuando estoy de vacacionesme funciona comer como quiero, inclusive, a la hora que quiero".

Por último, Furriel contó que, aunque ya está acostumbrado a la situación y no suele preocuparse, si tuvo que aprender a organizar una rutina alimentaria por cuestiones de salud. "Me gusta desorganizarme mucho porque, luego, mi vida es mucho más esquemática”", aseguró.

Qué es el síndrome de Gilbert: una condición hepática leve y hereditaria que muchas personas tienen sin saberlo

El síndrome de Gilbert es un trastorno genético que afecta la capacidad del hígado para procesar correctamente la bilirrubina, un pigmento que se produce al descomponerse los glóbulos rojos. Aunque puede provocar una ligera coloración amarillenta en la piel o los ojos, especialmente en momentos de estrés, ayuno o enfermedad, no representa un riesgo grave para la salud.

De hecho, la mayoría de las personas que lo tienen no presentan síntomas y lo descubren por casualidad a través de un análisis de sangre. No requiere tratamiento, no afecta la calidad de vida y tampoco causa daño hepático a largo plazo. Aun así, es importante conocerlo para evitar diagnósticos erróneos o preocupaciones innecesarias.