El 22 de enero de 2008, el mundo del cine quedó conmocionado con la noticia de la muerte de Heath Ledger. El actor australiano, de apenas 28 años, fue hallado sin vida en su departamento de Manhattan, Nueva York. La autopsia determinó que falleció por una intoxicación accidental causada por una mezcla de medicamentos recetados, entre ellos ansiolíticos, somníferos y analgésicos. Aunque no se trató de un suicidio, el episodio reflejó la presión y el desgaste que atravesaba en ese momento de su vida.
En los últimos meses, Ledger había manifestado problemas para dormir y un estado de agotamiento físico y mental. Personas cercanas al actor contaron que estaba sumergido en un intenso proceso creativo, especialmente tras dar vida al Guasón en Batman: el caballero de la noche (2008), la película de Christopher Nolan que lo inmortalizó. Ledger confesaba en entrevistas que el personaje lo había llevado a límites extremos, manteniéndolo despierto noches enteras. Sumado a ello, atravesaba dificultades personales tras su separación de la actriz Michelle Williams, con quien tuvo una hija, Matilda. Sus últimos días fueron una mezcla de soledad, cansancio y una búsqueda incesante por desconectar, algo que nunca logró del todo.
La trayectoria de Heath Ledger
Inició su carrera en Australia, país donde nació el 4 de abril de 1979, pero fue en Hollywood donde alcanzó reconocimiento internacional. Su primer gran salto llegó con 10 cosas que odio de ti (1999), una comedia juvenil que lo convirtió en un ídolo adolescente. Rápidamente demostró que su talento iba más allá de la belleza física: en Monster’s Ball (2001) sorprendió con un papel dramático, y en Secreto en la montaña (2005) obtuvo una nominación al Óscar por su interpretación de Ennis Del Mar, un vaquero marcado por una relación prohibida.
Sin embargo, fue su transformación en el Guasón lo que marcó un antes y un después en su carrera y en la historia del cine. Ledger construyó un villano oscuro, caótico y aterrador, alejado de cualquier versión previa del personaje. Para crear su interpretación, se encerró durante semanas en una habitación de hotel, elaborando voces, gestos y manías que terminaron por darle un carácter perturbador. Su actuación fue tan impactante que, tras su muerte, recibió de manera póstuma el Óscar al Mejor Actor de Reparto en 2009.
Ledger dejó un vacío enorme en la industria del cine a nivel mundial, pero también un legado imborrable que se mantiene en diferentes generaciones. Su trabajo aún es considerado uno de los más brillantes y complejos del cine moderno. Su vida y trayectoria son símbolo de un artista que vivió intensamente, aunque en muy poco tiempo.