"Hubo algo muy instintivo en empezar a escribir", confiesa Antonio Birabent del otro lado de la pantalla. Es un miércoles por la tarde y, pese a la dificultad de coordinar agendas, encontramos un rato en común para hablar de El filo, su nueva novela publicada por Paripé Books. Igual que ocurre con el protagonista, a medida que conversamos vamos descubriendo capas en una historia breve pero cargada de intensidad, que revela una faceta de Antonio que vale la pena conocer.
Un hombre viaja solo a una cabaña en medio de la montaña. No sabemos qué busca ni qué lo llevó hasta allí, pero acompaña al lector con sus reflexiones diarias sobre la experiencia de habitar un lugar tan remoto. Con la única compañía de Simón, su perro, y de Jorge, el dueño de la cabaña que aparece esporádicamente, el protagonista nos introduce en sus pensamientos más profundos y en memorias atravesadas por culpa, bronca y nostalgia.
La historia nació como un cuento de ocho páginas, pero Antonio decidió expandirla hasta convertirla en una nouvelle de poco más de ochenta. En ella, rompe prejuicios: en su brevedad encuentra lugar para la intensidad emocional y para zonas que uno no esperaría en un texto de tan bajo volumen. Se nota que el autor escribe lo que le gustaría leer. Con un ritmo y una estructura hemingwayana, Birabent construye una narración en capas que invita a avanzar firme para descubrir qué hay debajo. "Con las cosas que hago me gusta que sean más cortas que largas. Y, en estos días breves de vida del libro, uno de los comentarios más lindos que ya me hicieron un par de veces es: 'lo leí muy rápido, fácil, y al día siguiente lo volví a leer’", cuenta, orgulloso.
Más allá del estilo, el mayor imán del libro es su protagonista: ¿qué le pasó?, ¿qué lo llevó hasta esa montaña?, ¿qué busca realmente? Allí es donde el título cobra sentido. "Él vive en una intensidad a carne viva. Ese tiempo del que somos testigos en la montaña es continuo. Hasta cuando duerme pareciera estar así. Entonces es un doble filo: uno geográfico, porque está cerca de ese borde montañoso; y otro emocional, porque él mismo está al límite", reflexiona. Después agrega: "Pienso que el filo también es un principio. Si llegás al filo, supuestamente ya no hay nada. Él está un poco ahí, en ese borde emocional".
No son muchos los libros capaces de dejar una marca en tan pocas páginas. Pero cuando alguien escribe con la seguridad y la claridad con la que lo hace Antonio Birabent, surge una historia que trasciende. Ya sea leída de una sola sentada, como me ocurrió a mí, o espaciada en tramos, hay una certeza: El filo no se olvida fácilmente.
Sobre el autor
Antonio Birabent lleva más de tres décadas cantando, componiendo y actuando. Desde que regresó al país en 1987, después de vivir en España, ha editado más de treinta discos (Azar, Cuerdas, Demoliciones) y trabajado como actor en numerosas series y películas ampliamente reconocidas, como Verdad/Consecuencia, El Impostor y, Epitafios, entre otras. En 2022 publicó Tres (editorial Malisia). El Filo es su segundo libro.
