El famoso acordeonista y figura del folklore argentino Chango Spasiuk volvió a ser tendencia en el ambiente musical por una profunda reflexión sobre la diferencia de miradas entre el interior del país y la Ciudad de Buenos Aires. En el marco del ciclo “¡FAlklore!, el compositor dejó su marca al recordar sus primeras entrevistas con medios porteños y remarcó la “ignorancia” de la diversidad cultural del país.
“Me acordaba de esto de ciudad y el interior, a mí me pasaba cuando yo venía a fines de los 80, a principio de los 90 y el periodista te preguntaba, ‘¿Y por qué tocaste el acordeón?’”, introdujo Chango Spasiuk y explicó: “Una pregunta que era un sinónimo de que si tenías menos de 20 años, 15 o 16, deberías estar tocando una guitarra eléctrica o tocando rock and roll”.
"No entiendo su pregunta", consideró el músico de Misiones y señaló: “Porque vengo de un lugar en donde cuando yo era niño, iba a hacer un casamiento, había un acordeón, iba a hacer un cumpleaños, había un acordeón, iba a hacer una kermés también había un acordeón, iba a hacer un acto de una escuela, había alguien tocando el acordeón”.
En esa línea, el cantante de folklore, que viene de realizar una importante gira internacional durante el último mes, remarcó el rol de su instrumento: “El acordeón hace 45 años era como un iPad de última generación”. Brilla, lo tocás y suena, era como la última tecnología. Llena de nacar, brillante, era fascinante el instrumento”, agregó.
“Tenías 10 años y querías tocar el acordeón”, insistió Spasiuk y completó ante los colegas del ambiente musical: “O sea, no entiendo la pregunta, un poco esto de la ignorancia de la diversidad de nuestra música”. “Hay un montón de gente joven que toca esa música porque es el sonido de su infancia”, cerró.
Inesperada frase del Chango Spasiuk sobre el chamamé: “Atrapado”
El Chango Spasiuk es un referente indiscutido del folklore argentino y del chamamé en particular, por lo que sus expresiones sobre la famosa música del litoral siempre generan mucha repercusión. En esta ocasión, el cantante fue contundente y reveló lo que atravesó ese ritmo tan icónico de su Misiones natal: “Atrapado en un cliché”.
A la hora de definir al chamamé, el destacado acordeonista expresó que es “un mundo sonoro”. “Se nutre de la música barroca, del encuentro de los jesuitas con los guananiés, con la inmigración, con los mestizos, con los criollos, con los afro,con toda la historia que atraviesa toda una región durante 200 o 300 años”, repasó el Chango Spasiuk para dejar en claro el origen del género.
Sin embargo, el compositor lamentó: “Durante mucho tiempo, el universo del chamamé quedó como atrapado en un cliché de una música alegre. ‘Oh, qué lindo’”. “Me encanta el chamamé porque es una música alegre”, agregó antes de aclarar que “no puede ser simplemente una música alegre”.
Del mismo modo, Spasiuk completó: “Sí, el Chamamé es una música muy potente, muy poderosa, pero también es una música muy melancólica, con una profunda añoranza, con una profunda melancolía y también es una música muy esperanzadora”.