La serie Menem, disponible en Prime Video, se transformó en uno de los estrenos más comentados del año, no solo por su recreación de los años ‘80 y ‘90, sino también por las controversias que generó. Desde antes de su lanzamiento, la ficción enfrentó obstáculos judiciales relacionados con el uso de la imagen y la intimidad del expresidente Carlos Menem. Ahora, ya convertida en un éxito del streaming, suma otra polémica: la inspiración detrás de algunos personajes.
Uno de los nombres que despierta más curiosidad es el de Amanda Salas, interpretada por Jorgelina Aruzzi, una figura que aparece muy cercana al poder en la trama. Esto hizo que muchos espectadores se pregunten si está basada en una persona real, y más concretamente en una mujer icónica del menemismo: ¿es Amanda Salas en realidad Elsa Serrano?
¿Amanda Salas es Elsa Serrano en la serie de Menem?
Aunque la producción nunca lo confirmó de manera oficial, las similitudes entre Amanda Salas y Elsa Serrano son evidentes. En la ficción, Amanda es presentada como una modista riojana, casada con un fotógrafo, siempre cerca de los bastidores del poder, rodeada de vestidos, lentejuelas y secretos. Esta descripción remite directamente al rol que Elsa Serrano ocupó en la vida real durante la década menemista.
Serrano no fue solo una diseñadora de moda: fue la modista del poder, la mujer que vistió a Zulema Yoma, a Zulemita Menem y a las principales figuras del espectáculo argentino, como Mirtha Legrand, Susana Giménez y Norma Aleandro. Su estilo elegante y sofisticado marcó la estética de toda una era, convirtiéndola en un ícono del glamour en los años ‘90.
¿Quién fue Elsa Serrano?
Nacida en Calabria en 1941, Elsa Serrano, cuyo nombre real era Elsa Romio, llegó a Argentina a los 14 años. Comenzó trabajando como modista y a los 19 abrió su primera boutique, Fiorella, en la calle Soldado de la Independencia. Desde allí, construyó una carrera que la llevó a vestir a las mujeres más influyentes del país. Incluso fue la autora del vestido de Claudia Villafañe en su casamiento con Diego Maradona, y del traje de Susana Giménez para su boda con Huberto Roviralta.
En la cúspide de su fama, Serrano era habitué en la Quinta de Olivos y en los vuelos presidenciales, diseñando atuendos para eventos oficiales y giras internacionales. Sin embargo, su vínculo con la familia Menem no terminó bien: la diseñadora aseguró que nunca le pagaron por los vestidos y llegó a iniciar acciones legales contra Zulema y Zulemita.
Su vida también tuvo un final trágico: en 2020 murió en un incendio en su departamento de Retiro, a los 79 años. Pese a los golpes económicos, nunca dejó de trabajar y se definía como “una luchadora incansable”.