Días antes de la presentación del RB20 que usaron Max Verstappen y Sergio “Checo” Pérez en 2024, la Fórmula 1 se revolucionó ante la posible salida de Christian Horner de Red Bull. De manera inesperada, el británico fue demandado por haber acosado a una empleada del equipo con el uso de una “conducta indebida”, lo que generó todo un revuelo dentro de la escudería austriaca a semanas del inicio de la pretemporada.
A causa de esto, Red Bull dispuso de un tribunal interior que se encargó de la investigación del caso y no encontró pruebas suficientes como para desplazar al director de su cargo en el equipo. De hecho, Horner fue exonerado de las acusaciones a fines de febrero del año pasado, tras lo que tanto el director de la escudería austriaca buscó llegar a un acuerdo con su exempleada para que no vuelva a tratarse el tema.
Sin embargo, la mujer no solo no aceptó ningún ofrecimiento por parte de Horner y de Red Bull, sino que ahora llevó el caso a los tribunales de Londres, concretamente al Tribunal Laboral de la ciudad inglesa. Así lo reveló el diario De Telegraaf, en donde se detalló que los jueces aceptaron tratar el caso y han fijado una fecha para el inicio del juicio, que comenzaría en enero del próximo año.
Cabe destacar que en esta oportunidad no será solamente un caso contra Horner, sino también contra Red Bull, puesto que la empleada fue suspendida debido a que se interpretó el uso de falso testimonio para perjudicar al británico. Esto se debe a que el equipo había contratado un abogado tras el segundo reclamo de la mujer, con lo que Horner recibió una segunda exoneración en agosto.
Preocupación en Red Bull por el RB21
Tras la salida de Adrian Newey, el nuevo monoplaza de Red Bull es el primero construido bajo las órdenes de Pierre Waché, quien no quedó muy conforme con el rendimiento que tuvo el RB21 en las prácticas de pretemporada. No solo no hubo una mejora significante con respecto a su predecesor, sino que tanto Max Verstappen como Liam Lawson tuvieron que hacer correcciones a la hora de abordar las curvas lentas.
“No estoy tan feliz como podría estarlo porque el coche no respondió como queríamos en algunos momentos, pero va en la dirección correcta”, comenzó el ingeniero francés en declaraciones rescatadas por Claro Sports. Además, mencionó que lo bueno es que los problemas aparecieron ahora, lo que les da tiempo para hacer los ajustes pertinentes de cara al comienzo de la temporada en el Gran Premio de Australia el próximo 14 de marzo.