Rafael Bielsa, a 5 años de la muerte de Diego Maradona: "Nunca le tuvo miedo a la política"

A cinco años de la muerte de Diego Maradona, Rafael Bielsa habló en exclusiva con El Destape. El rosarino recordó el "No al ALCA" en 2005, que tuvo al "Diez" presente, cuando él era el ministro de Relaciones Exteriores de Argentina. Los detalles de aquel viaje en el Tren del Alba de Constitución a Mar del Plata.

25 de noviembre, 2025 | 06.00

Rafael Bielsa fue uno de los tantos representantes nacionales que viajaron en mítico Tren del Alba que salió desde Constitución hacia Mar del Plata, para formar parte de la contracumbre que históricamente se denominó No al ALCA. Además del hermano de Marcelo Bielsa, exentrenador de la Selección Argentina, también fue una de las personalidades destacadas pero, sin dudas, la más convocante fue Diego Armando Maradona. El Diez estuvo desde la mañana y se convirtió en el centro de atención. Aunque no fue el único, si fue el que llevó el centro y las miradas. También estuvieron Hebe de Bonafini (Madres de Plaza de Mayo), Luis D´Elía, Tristán Bauer y Teresa Parodi.

Argentina, gobernada en aquel entonces por Néstor Kirchner, fue uno de los tantos países progresistas que rechazó la idea, ya que consideraba (entre otras cuestiones) que profundizaba la desigualdad y la pobreza en Sudamérica en favor de la nación norteamericana. No querían que, una vez más, casi toda Latinoamérica fuera el "patio trasero" de Estados Unidos.  Allí estuvo Diego Maradona poniendo el pecho ante la situación y el ministro de Relaciones Exteriores de la República Argentina fue parte de la contracumbre conocida como "No al ALCA" ese 5 de noviembre junto con Diego. Y, en charla con El Destape, destacó cómo fue ese viaje para ponerle un freno a George W. Bush.  Bielsa repasó los detalles de aquel evento único, recordó con afecto a Maradona a cinco años de su muerte y sostuvo que el ídolo del fútbol argentino "nunca le tuvo miedo a la política".

- ¿Qué significó el No al ALCA para usted? ¿Por qué se opuso al ALCA y qué pensaba del gobierno de Bush en ese momento?

No fui yo quien se opuso, yo era nada más que el ministro de Relaciones Exteriores del gobierno de Néstor, apenas un secretario del Jefe de Estado... La oposición argentina a aquel ALCA fue una decisión del presidente Kirchner y adicionalmente, un acto de trascendencia colectiva. Además del nuestro, hubo otros países que tuvieron protagonismo: Brasil con Lula, Venezuela con Chávez, Uruguay con Tabaré, Paraguay con Duarte Frutos y Bolivia con Evo, aunque aún no era el presidente electo. Estos países, junto con otros movimientos sociales reunidos en la Cumbre de los Pueblos, rechazamos el ALCA porque la consideramos una herramienta de dominación económica que favorecía a las grandes corporaciones y debilitaba la soberanía nacional. La frase de Chávez, de ´ALCA al carajo´, se volvió un símbolo de aquella resistencia.

Las imágenes de Bielsa durante el No al ALCA en 2005 (gentileza Rafael Bielsa).

- ¿Qué papel jugó Maradona en aquel momento en el ámbito político, teniendo en cuenta que era una figura tan popular surgida en el fútbol?

La frase icónica de Chávez, de ´ALCA al carajo´, la pronunció en la Cumbre de los Pueblos. Usó la frase como símbolo del rechazo del Tratado de Libre Comercio. El discurso tuvo lugar en el Estadio José María Minella de Mar del Plata, allí participó Maradona junto con Silvio Rodríguez y Evo Morales.

- ¿Qué papel jugó Maradona en aquel momento en el ámbito político, teniendo en cuenta que era una figura tan popular surgida en el fútbol?

La frase icónica de Chávez, de ´ALCA al carajo´, la pronunció en la Cumbre de los Pueblos. Usó la frase como símbolo del rechazo del Tratado de Libre Comercio. El discurso tuvo lugar en el Estadio José María Minella de Mar del Plata, allí participó Maradona junto con Silvio Rodríguez y Evo Morales.

- ¿Cuál fue su relación con Maradona y de qué hablaron en esa época?

Yo no tuve una relación personal con Maradona, en esa época no hablé. Kirchner había ordenado una división del trabajo, en la que yo estaba a cargo de la cuarta cumbre y Jorge Taiana, de la de los Pueblos. De hecho en el acto de cierre, el Presidente me dio el honor de presidir la cuarta Cumbre, una honra abrumadora.

- ¿Qué recuerda del Maradona "político" en general? ¿Extraña algo de él en ese sentido, siente que ya no hay figuras del fútbol que se la jueguen como hacía él?

No sé si existió algo así como ´el Maradona político´, él tenía incorporado en su carácter que todo, inclusive el silencio, es político. Porque todo quien se calla ante la justicia, toma partido por ella. Y Diego nunca se calló. En ese verbo estuvo la raíz de su naturaleza. Pertenecía a una generación con menos individualismo y menos individualistas, no le tenía ningún miedo a la política.

Rafael Bielsa recordó el No al ALCA, con Maradona también protagonista.

- Maradona calificó a Bush en aquel entonces de "asesino" y opinó que le hizo "mucho daño" a la Argentina. Transcurridos 20 años, ¿tuvo razón?

Transcurridos 20 años, las cosas se miran de otro modo, a lo mejor con menos intensidad o con una pasión sobreviviente. Conmueve la sinceridad de Diego, al catalogar a Bush exteniendo su calificación a sus decisiones, pienso, más que a sus actos. Y también a su sentido de la soberanía y su patriotismo. Hoy Bush le hubiese hecho mucho más daño a la Argentina, con la indiferencia y la codicia de quienes nos están gobernando. Cuando Diego lo dijo, no le había hecho tanto daño porque era una época y eran unos actores que se lo impidieron todo lo que pudieron.

En diciembre de 1994, durante la primera Cumbre de las Américas celebrada en Miami, recuerdo los esfuerzos de Vicente Fox, el presidente de México, por agradarle a Bush. En el 2005, el formato seguía siendo el mismo, pero Latinoamérica ya era otra. Siempre hay alguien que elige ser servil y alguien que elige la dignidad, como la actual presidenta de México, Claudia Sheinbaum. Transcurridos 20 años, creo que el tiempo le dio la razón a Diego.

- Si tuviera que elegir a alguien del fútbol mundial en la actualidad similar a Maradona en el aspecto político, ¿quién sería?

Hoy no hay alguien que futbolísticamente se compare con Diego, por lo cual es imposible elegir a alguien que políticamente sea comparable con él. A veces me pregunto cómo jugaría Diego en el fútbol de hoy. Me imagino que mi viejo también se habrá preguntado en el ´70 cómo habrá jugado José Manuel Moreno, el "Charro". Maradona sumaba mucho: pasión popular, críticas al poder, apoyo a líderes latinoamericanos como Fidel, Chávez, Evo... Una defensa visceral de los sectores marginados. Pienso en Cristiano Lucarelli, en (Ousmane) Démbéle, en Eric Cantoná, pero ninguno de ellos es futbolísticamente comparable a Diego y políticamente tampoco.

Las imágenes de Bielsa durante el No al ALCA en 2005 (gentileza Rafael Bielsa).

- ¿Qué recuerdos tiene de aquel viaje a Mar del Plata, más allá del evento oficial en sí?

Tengo muchos recuerdos. Los medios hegemónicos querían instalar que si Bush no venía a Argentina, eso debía implicar un ridículo de nuestra diplomacia y del país. Era una amalgama político-comunicacional y de negocios del gran empresariado local, de empresas nativas y también extranjeras. Batían el parche con que era el hombre más poderoso del planeta, que comandaba la primera potencia mundial... Nosotros buscamos el texto consensuado en un acuerdo. Hasta el viernes 4 de noviembre estuvo todo en duda, no llegamos a ningún acuerdo, hablamos todo el tiempo por teléfono.

El presidente Bush vino, incómodo, y se fue al día siguiente. Los sacadores crónicos de dólares, el núcleo del poder económico, los comunicadores orgánicos tuvieron que morderse la lengua. La legitimidad del gobierno argentino ante la ciudadanía crecía día tras día. También recuerdo las calles de Mar del Plata prácticamente blindadas y el mar, porque unidades navales patrullaban la costa marítima. Decenas de helicópteros formaban parte del mecanismo de seguridad frente a la presencia de Bush. Recuerdo nuestras miradas del servicio exterior hacia el complejo deportivo, en ocasión del Mundial de fútbol de 1978, donde sesionaba la Cumbre de los Pueblos, la cumbre paralela. Kirchner, el viernes 4 de noviembre del 2005, promediando la tarde, lo recuerdo diciendo sus palabras de recepción a los invitados. Dijo que nuestro continente y nuestro país eran la prueba del fracaso de la teoría del derrame.

Dijo que con mucho esfuerzo, y sin la ayuda del Fondo Monetario Internacional, habíamos reestructurado la deuda, superado el default, reducido en más de 14.900 millones de dólares nuestra deuda con los organismos multilaterales de crédito. Eso significaba, al mismo tiempo, lograr importantísimos avances en la lucha por la equidad. Y cerró aquella bienvenida con que era muy necesario introducir mejoras en el funcionamiento del sistema financiero, que la economía globalizada lo exigía. Son muchos los recuerdos, y muchos recuerdos los que están pendientes.

Las imágenes de Bielsa durante el No al ALCA en 2005 (gentileza Rafael Bielsa).

- Si tuviera hoy a Maradona enfrente y recordaran juntos el No al ALCA, ¿qué le diría?

Le diría: "Éramos tan jóvenes, Diego...". Y creo que Diego a mí me diría lo mismo: "Éramos tan jóvenes".

- ¿Alguna anécdota o momento bisagra puntual a nivel personal que recuerde del No al ALCA y le haya quedado grabado en la memoria para siempre?

Hay uno que tiene un valor personal. El sábado 5, pasado el mediodía, fuimos algunos a un recinto contiguo a donde se celebraba la cumbre, a conversar acerca de cómo seguíamos. La mañana había sido tempestuosa y el clima era ardiente. Recuerdo a Lula, Tabaré, a Kirchner que presidía la reunión.

Cuando regresábamos, Samuel Lewis, el primer vicepresidente panameño que era el Ministro de Relaciones Exteriores, interceptó a Kirchner, que hablaba conmigo. Le dijo: "Presidente y amigo, una pequeña concesión le voy a pedir, un esfuerzo más. Simplemente le ponemos una fecha de reiniciación de las negociaciones con el ALCA a la declaración final y esto termina de fiesta. Kirchner se detuvo y lo miró: "Panamá, ¿no? ¿Panamá me dijo? Se revolvería en su tumba de asco si lo pudiera escuchar el general Omar Torrijos" (líder político y militar panameño que logró que su país retomara el control del Canal de Panamá, que había estado en manos de Estados Unidos). Lewis se escurrió, como el agua de lluvia por un desagüe.

Caminamos dos pasos más y sentí la mano de Kirchner sobre mi espalda: "Ahora, Rafael, presidí vos". Miré la sala, a los mandatarios ocupando sus lugares, me dirigí a la presidencia y recordé que existe un gremio más temible todavía que el de los corsarios, si tuvieran un gremio, que es el de los traductores. Tenían multilingüismo exactamente hasta las 18 horas, ni un segundo más. Era como resolver un cubo de Rubik, salvo que era un cubo orgánico y con hora de vencimiento. Nunca voy a olvidarme de aquella mano, de aquel momento, de aquel amigo Néstor Kirchner que ya no está.