El Fondo Monetario Internacional (FMI) acelera la implementación de las reformas estructurales previstas en el último acuerdo, entre ellas la previsional, laboral e impositiva, y comenzará a discutirlas con el gobierno de Javier Milei dentro de dos semanas, cuando la primera misión del organismo llegue al país. Además, elogió las últimas medidas del Banco Central para el fortalecimiento de reservas, aunque evitó adelantar si Argentina llegará a cumplir con la meta o si, en caso contrario, podría otorgar un perdón parcial (waiver).
Según confirmó la vocera del organismo, Julie Kozack, "a fin de junio" llegará al país la primera misión técnica luego del acuerdo firmado en abril pasado, que deberá evaluar el cumplimiento de las metas para, en ese caso, aprobar la primera revisión y permitir así un nuevo desembolso de 2.000 millones de dólares. Aunque la visita había sido anticipada por el Ministerio de Economía, ahora el Fondo le puso un rango de tiempo más preciso.
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Como es habitual, la misión se ocupará de "evaluar el progreso en las metas y objetivos del programa", señaló Kozack al brindar su conferencia de prensa regular, de la que participó El Destape. Pero la vocera añadió que, en el marco de la misión, también "se debatirá la agenda de reformas futura de las autoridades".
De este modo, se refirió a las "reformas estructurales" contenidas en el acuerdo técnico firmado en abril pasado, como la reforma previsional, la reforma laboral, la reforma tributaria, la reforma en la coparticipación, las privatizaciones y la quita de subsidios a las tarifas de luz y gas.
La primera reforma que deben ser implementadas, según el acuerdo técnico, es la de las privatizaciones, cuyo proyecto debe presentarse entre mediados de septiembre y fines de noviembre de 2025. Luego, a finales de noviembre de 2025, se debe implementar la desregulación del Mercado Mayorista Eléctrico, y para fines de diciembre de este año se debe presentar el plan de reforma impositiva. Se trata, evidentemente, de fechas próximas cuya implementación requiere de una discusión inmediata.
La que es probablemente la reforma más polémica, la previsional, está prevista recién para diciembre de 2026. Es decir, ya con el nuevo Congreso que asumirá en diciembre plenamente marchando, cuando el oficialismo espera tener un número superior de bancas que le permita impulsar el proyecto en mejores condiciones. En paralelo, el acuerdo establece la necesidad de dar "mayor flexibilidad" al "mercado laboral", aunque sin establecer una fecha precisa. Como sea, todas estas discusiones se pondrán en marcha a fines de junio con la llegada de la misión técnica a Buenos Aires.
El FMI evitó adelantar si otorgará un waiver
Por otro lado, el FMI respaldó las medidas anunciadas por el Banco Central el último lunes con el objetivo de fortalecer las reservas y acercase así al cumplimiento de la meta de reservas netas que, según el acuerdo técnico, vence este viernes 13 de junio. Se trata, básicamente, del repo por 2.000 millones de dólares y del nuevo bono suscripto en dólares por otros 1.000 millones de dólares.
"Celebramos las recientes medidas anunciadas esta semana por el Banco Central y el Ministerio de Economía, ya que representan otro paso importante en los esfuerzos por consolidar la desinflación, apoyar la estrategia de financiamiento de la gobernanza y reconstruir las reservas", afirmó Kozack al respecto.
La vocera del FMI elogió específicamente al bono suscripto en dólares, el primero de este tipo emitido en unos siete años, al que describió como un "exitoso regreso del Tesoro a los mercados de capitales" internacionales. Esta semana, el Gobierno también anunció que hará una licitación de este tipo por mes, cada una por 1.000 millones de dólares. Además, ayer anunció la ampliación del primer bono suscripto en mayo por otros 500 millones.
Pese a esta acumulación de reservas, todavía es dudoso que Argentina logre alcanzar la meta prevista en la primera revisión, necesaria para que el organismo realice un nuevo desembolso de 2.000 millones de dólares. Es por esto que, en las últimas semanas, el Ministerio de Economía anunció tácitamente que la revisión se realizará recién en julio, probablemente a fines de ese mes, dándole al gobierno un tiempo extra clave para acercarse a la cifra necesaria (acumulación de 4.500 millones de dólares en reservas netas por encima de las que el BCRA tenía con la firma del acuerdo el 11 de abril).
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Sin embargo, aun con ese enfoque positivo, el FMI no contestó las preguntas de la prensa acerca de si otorgará un waiver o perdón parcial por incumplir una de las metas (precisamente la de reservas, ya que se descuenta que no habrá problema con las metas fiscales).
Así, el Fondo procuró tener un gesto político para con Javier Milei y Luis Caputo, ya que, de haber mencionado la posibilidad del waiver, hubiera admitido implícitamente que cree que es probable que el Gobierno no cumpla con la meta prevista. Es decir, que Argentina no lograría cumplir con todas las metas ya en la primera revisión y a menos de tres meses de la firma del acuerdo, algo que no caería bien en los mercados internacionales a los que el equipo económico apunta como fuente de reservas, mientras el BCRA resigna acumular dólares mientras la divisa no toque el piso de la banda inferior.
De este modo, todo indica que el FMI apreciará los esfuerzos hechos por el Gobierno para acumular reservas en estas semanas y que, aunque seguramente no pueda evitar el waiver, terminará aprobando la primera revisión el próximo mes.