La motosierra de Milei recortó el 20% del gasto en el acumulado del año

Es el mayor recorte de subsidios a la energía, con una caída acumulada de 46,1% interanual, por reducción de subsidios para atender la brecha entre costos y tarifas de la generación eléctrica y la menor compra de gas importado.

13 de noviembre, 2025 | 16.35

Los gastos totales cayeron 20 por ciento en el acumulado a octubre respecto de igual período del año pasado, cuando ya había pasado la motosierra libertaria. “Por orden de incidencia, en la comparación interanual se destacan subsidios a la energía: -46,1 por ciento interanual, por reducción de subsidios para atender la brecha entre costos y tarifas de la generación eléctrica y la menor compra de gas importado”, según el último informe de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP). Los tijeretazos incluyen partidas y gastos en programas sociales y de capital y subsidios al Transporte.

Uno de los pocos rubros donde hubo un crecimiento real del gasto en los primeros diez meses del año fue en las transferencias con destino a la obra pública (179 por ciento), mayormente por los desembolsos al Fondo Fiduciario del Sistema de Infraestructura de Transporte destinados al financiamiento de obras de la Dirección Nacional de Vialidad. Es la prenda de cambio con la que el presidente Javier Milei busca conseguir apoyo al presupuesto del año próximo. La premisa es sostener el equilibrio fiscal, principal ancla de su gestión, aunque igualmente reconocerá un incremento por encima de la inflación proyectada para obras públicas en provincias y municipios.

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El mensaje que acompaña el proyecto de Presupuesto menciona que en 2026 se dará prioridad a obras viales de la Dirección Nacional de Vialidad, proyectos de modernización ferroviaria con renovación de infraestructura y material rodante, inversión energética orientada al desarrollo hidroeléctrico y nuclear, fortalecimiento de defensa y seguridad, y la ampliación de redes de agua y saneamiento. “La ampliación y optimización de las redes de agua y saneamiento apuntan a mejorar la cobertura y calidad del servicio”, describe el documento. Una manera de convencer a los gobernadores de que les voten el presupuesto del año próximo.

Los otros recortes

Dentro del paquete de ajuste del gobierno de Javier Milei en los primeros diez meses del año se destacan los gastos en personal (-9,9 por ciento interanual), resultado de paritarias por debajo de la inflación y de la disminución en la cantidad de cargos ocupados en la planta permanente y transitoria, y en la cantidad de personal contratado, mayormente en el Poder Ejecutivo; en programas sociales (-18,2 por ciento), principalmente como consecuencia de la pérdida del poder de compra del valor de las prestaciones; en gastos de capital (-29,4 por ciento), por recortes en transferencias de capital a fondos fiduciarios y empresas públicas como Enarsa y Aysa y en subsidios al transporte (-23,4 por ciento), por disminución de compensaciones a las tarifas a pasajeros en el AMBA.

Dentro del recorte en las erogaciones por salarios, se discrimina el del personal del Poder Ejecutivo, con una baja real acumulada de -9,8 por ciento interanual; del Poder Judicial de la Nación, -5,5 por ciento; del Ministerio Público, -3,1 por ciento y del Poder Legislativo, -11,5 por ciento. “Las pautas salariales acordadas en el período analizado se ubicaron por debajo de la inflación”, aseguró el informe de ASAP.

En relación con la cantidad de cargos ocupados, al mes de septiembre del ejercicio vigente (última información disponible) se verifica en el Poder Ejecutivo una baja de 3,6 por ciento respecto a septiembre de 2024 en los cargos de planta permanente y transitoria, y una disminución de 7,6 por ciento en el personal contratado.

En programas sociales el ajuste fue aún peor. El plan Volver al Trabajo y Acompañamiento Social (ex Potenciar Trabajo) se redujo en el año -38,2 por ciento interanual, explicado principalmente por el congelamiento del valor de la prestación desde diciembre de 2023. “Desde esa fecha, el poder de compra se ha deteriorado en un 63 por ciento medido por inflación”, destacó el informe. En políticas alimentarias, el ajuste real fue de 17,4 por ciento, que incluye la Prestación Alimentar (-19 por ciento). El monto de esta última prestación no tuvo incrementos desde junio de 2024, presentando una pérdida de poder de compra de 24 por ciento interanual promedio en diez meses del año. “En sentido contrario, incide la ampliación del universo de beneficiarios que tuvo lugar en septiembre de 2024”, concluyó ASAP.