Una persona murió y al menos 14 resultaron heridas cuando drones rusos atacaron durante la noche la ciudad ucraniana de Odesa, en el mar Negro, dañando edificios de gran altura e infraestructuras ferroviarias, según informaron el viernes las autoridades locales y la fiscalía.
Odesa es el mayor puerto ucraniano del mar Negro, clave para las importaciones y exportaciones, y ha sido objeto de constantes ataques con misiles y drones de Rusia desde que comenzó la guerra.
"A pesar del trabajo activo de las fuerzas de defensa antiaérea, hay daños en la infraestructura civil, incluidos edificios residenciales, una institución de educación superior, un gasoducto y coches particulares", dijo el gobernador local, Oleh Kiper, en la aplicación de mensajería Telegram.
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Kiper publicó fotos de casas en llamas y rascacielos carbonizados.
El servicio de emergencias local dijo que durante el ataque hubo al menos 10 impactos de drones contra edificios residenciales, lo que provocó incendios masivos.
Las fuerzas aéreas ucranianas afirmaron el viernes que Rusia había lanzado 86 drones contra Ucrania durante la noche.
Los militares señalaron que sus unidades de defensa antiaérea derribaron 34 drones, mientras que otros 36 se perdieron, en referencia a que los militares ucranianos utilizaron la guerra electrónica para redirigirlos, o eran simuladores de drones que no llevaban ojivas.
Sin embargo, el ejército informó de que los drones alcanzaron ocho localidades.
Los ferrocarriles estatales ucranianos, Ukrzaliznytsia, informaron de que la estación de trenes de Odesa sufrió daños durante el ataque, con cables eléctricos y raíles dañados.
Los drones rusos también atacaron Járkov, en el noreste de Ucrania, durante la noche, dañando varias casas privadas y de varios pisos, según informaron las autoridades de la ciudad.
Con información de Reuters
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