Contra la "despolítica" y el ajuste: quién es Graciela de La Rosa, la candidata de Insfrán para el 26 de octubre

Con vasta militancia política y experiencia en la gestión, Graciela de la Rosa es la elegida de Gildo Insfrán para defender los derechos de los formoseños en el Congreso de la Nación.

19 de octubre, 2025 | 15.30

 

En un escenario nacional que califica como “crítico” y “difícil”, la licenciada Graciela de la Rosa, candidata a diputada nacional por el Frente de la Victoria, propone una plataforma basada en la defensa de la soberanía provincial y los derechos sociales frente a lo que denomina la “despolítica” del actual Gobierno nacional. Su postulación se inscribe en una trayectoria de compromiso político, militancia y gestión pública que la respalda como una de las figuras más experimentadas del peronismo formoseño.

De la Rosa no es una figura nueva en la política argentina. Si resulta electa, asumirá por tercera vez una banca en la Cámara de Diputados de la Nación. Su vínculo con el peronismo comenzó en su adolescencia, cuando descubrió La razón de mi vida de Eva Perón en una siesta formoseña. Desde entonces, su vocación política se consolidó con una mirada humanista, feminista y profundamente social.

Durante la dictadura militar de 1976, fue perseguida y encarcelada por motivos políticos, primero en la Alcaldía de Resistencia y luego en el penal de Devoto. Allí, vivió en carne propia la solidaridad entre mujeres y las desigualdades que atravesaban las presas políticas. “Las compañeras comunes arriesgaban su seguridad para pasarnos diarios o compartían la poca comida con las embarazadas. Esa experiencia extrema me marcó para siempre”, recuerda.

Al recuperar su libertad, fue reconocida por la ONU (LNUR) como refugiada política y se exilió en México hasta el retorno de la democracia. Su regreso a la militancia activa se produjo a partir de la convocatoria de Gildo Insfrán, entonces vicegobernador, con quien volvió a enraizarse en la política provincial.

Para De la Rosa, el proyecto que lidera el gobernador Insfrán representa una continuidad histórica de justicia social y soberanía provincial, una política que combina desarrollo económico con inclusión. Destaca, por ejemplo, el Programa PAIPPA, al que considera heredero de las luchas de las Ligas Agrarias y de los campesinos perseguidos durante los años 70.

“Formosa logró construir un modelo provincial sólido, con equilibrio fiscal, desendeudamiento y políticas sociales que garantizan derechos esenciales como la alimentación y la educación”, explicó. En ese sentido, resalta medidas como el Plan Nutrir, el Incentivo Docente Provincial y las cajas alimentarias para comunidades originarias, que el Estado formoseño sostiene con recursos propios frente al retiro del apoyo nacional.

De la Rosa, quien presidió la Convención Constituyente que reformó la Constitución provincial, considera que la capacidad de gestión y planificación que caracteriza a Formosa debe proyectarse al Congreso Nacional. “Formosa es el faro que demuestra que el peronismo vive, que puede sostener la justicia social y la igualdad de oportunidades”, afirmó.

Frenar el “ímpetu libertario” en el Congreso

Su principal desafío legislativo, asegura, será frenar el ímpetu libertario del Gobierno de Javier Milei, que impulsa la privatización de servicios públicos y el desmantelamiento del Estado. “Estamos ante un proceso de despolitización planificada, que intenta vaciar la democracia y convertirla en un tablero financiero”, sostuvo.

La candidata enumeró los ejes de su plataforma legislativa:

  • Defensa de la Constitución y del presupuesto federal: exigir que el Ejecutivo respete la Carta Magna y presente un Presupuesto Nacional que contemple a todas las provincias, financiando infraestructura y políticas sociales.
  • Límite a los decretos y DNU: denunciar el uso abusivo de herramientas excepcionales que derivaron en “el recorte más grande de la historia”, afectando organismos como el INTA, el INTI y las pensiones por discapacidad.
  • Protección de los recursos federales: rechazar cualquier intento de modificar la coparticipación, defendiendo los fondos que pertenecen a las provincias y no son “un regalo de la Nación”.
  • Batalla cultural y social: oponerse al discurso neoliberal que califica a la justicia social como “un robo”. Para De la Rosa, la verdadera lucha global es “contra la desigualdad”, y la historia del peronismo demuestra que la equidad es una conquista, no un privilegio.

Junto a su compañero de fórmula, Fabián Cáceres, De la Rosa plantea que las dos bancas formoseñas en el Congreso deben ser una voz firme en defensa de la educación pública, la salud y el empleo. “No podemos permitir que se priorice la economía financiera sobre la economía real y productiva, porque eso genera desempleo y salarios que no alcanzan para vivir”, advirtió.

La candidata subraya que su propuesta no se trata de resistir, sino de reconstruir la política como herramienta de transformación. “La despolítica es la estrategia del poder para desmovilizar a la sociedad. Nuestro desafío es devolverle sentido, valores y esperanza a la política”, afirmó.

En su recorrido por la provincia, De la Rosa enfatiza el compromiso con las mujeres, los jóvenes y los trabajadores. “Formosa tiene una historia de lucha y organización. Este proyecto no se construye desde el marketing, sino desde la comunidad organizada”, sostiene.

A 40 años del retorno de la democracia, su mensaje sintetiza un llamado a la memoria y a la acción: “Defender Formosa es defender la Patria. No hay justicia social posible sin soberanía, y no hay soberanía sin política. Frente a la despolitización y el ajuste, nuestra tarea es proteger los derechos conquistados y abrir caminos para las nuevas generaciones”.