El subsecretario de Defensa al Consumidor y Usuario de Formosa, Édgar Pérez, se refirió a las consecuencias del Decreto 446/2025 firmado por el Gobierno nacional, que desregula el mercado de Gas Licuado de Petróleo (GLP). De esta forma, advirtió que la medida provocará un aumento inmediato en el precio de las garrafas y afectará gravemente a los hogares formoseños, especialmente en las zonas más alejadas del interior.
“Este sería un segundo capítulo”, señaló Pérez, al recordar que los formoseños ya sufrieron un brutal incremento en las tarifas eléctricas durante el verano. “En tiempos de calor nos aumentaron la luz en más de mil por ciento, ahora en invierno redoblan la apuesta y van por el gas”, remarcó en comunicación con el portal Agenfor. Según el funcionario, esta política de desregulación forma parte de una estrategia de ajuste estructural que genera “daños directos sobre toda la población”, en especial sobre los sectores más vulnerables, la producción, el comercio y el transporte.
Pérez criticó duramente la política energética del Gobierno nacional. “El Estado se retira y deja todo en manos del mercado, como si este fuera un dios que actúa con justicia. Pero sabemos que el mercado solo va donde hay ganancia. Así, muchas localidades del interior profundo de Argentina han sido abandonadas”, sostuvo.
Recordó que en Formosa y en gran parte del noreste argentino, el acceso al gas depende casi exclusivamente del gas envasado en garrafas, ya que la región nunca fue integrada a la red nacional de gas natural. “Gobiernos como el de Macri y ahora el de Milei no invirtieron un solo peso en ampliar las redes de gas. Incluso paralizaron las obras del gasoducto, que estaba casi terminado pero nunca tuvo gas para inyectarse”, denunció.
Frente a este panorama, el subsecretario celebró que Formosa haya decidido, años atrás, invertir en infraestructura propia. Gracias a ello, hoy la provincia cuenta con una planta fraccionadora en el Parque Industrial que opera bajo la órbita de REFSA Gas. “Esto es soberanía energética. Nos permite comprar gas, transportarlo con logística propia, fraccionarlo en nuestra planta y distribuirlo en toda la provincia con precios razonables”, explicó.
Actualmente, REFSA Gas establece un precio testigo para las garrafas, permitiendo al Gobierno provincial intervenir en el mercado para proteger al consumidor. Pérez detalló que una garrafa de 10 kilos se vende en el marco del programa alimentario Soberanía a $15.000, un precio que considera accesible para las familias y que sirve de referencia para el comercio.
“El Estado provincial no solo compra y distribuye el gas, también subsidia el transporte para garantizar que las garrafas lleguen a cada localidad, incluso aquellas donde ninguna empresa privada quiere ir porque no les resulta rentable. Allí está presente el Modelo Formoseño”, subrayó.
El funcionario señaló que el aumento de precios fue desmedido. “En enero de 2024, un camión con 23 toneladas de gas costaba alrededor de $1.300.000. En febrero de 2025, ese mismo camión pasó a costar más de $14 millones. Es un aumento del 1000%, completamente injustificable”, detalló.
Pérez también alertó sobre los límites estructurales que enfrenta la empresa provincial. “REFSA Gas tiene una capacidad operativa que está sujeta a los cupos fijados por la Secretaría de Energía de la Nación. No es que falte gas en el país, con Vaca Muerta tenemos reservas suficientes. Pero el Gobierno prioriza las exportaciones y los negocios con sus socios antes que el abastecimiento interno”, criticó.
Incluso, señaló que muchos camiones de gas son desviados hacia otras regiones o cruzan hacia países vecinos, debido a que el negocio de exportar es más rentable. “Mientras millones de argentinos padecen el frío, las empresas amigas del poder hacen negocios. Es un modelo que prioriza el lucro por sobre la vida de las personas”, expresó.
A pesar de este escenario adverso, Pérez garantizó que el Gobierno de Formosa seguirá interviniendo para sostener el abastecimiento de garrafas y evitar que las familias queden desprotegidas. “No importa la camiseta política que tenga un vecino. En Formosa, gracias a un Estado presente, las garrafas van a llegar y lo harán a un precio razonable. Eso es justicia social”, afirmó.
Finalmente, remarcó la importancia de la previsibilidad y la planificación estatal. “Mientras el Gobierno nacional vive en el cortoplacismo y la improvisación, nosotros seguimos pensando en el bienestar de los formoseños. Porque sabemos que si llega el invierno, va a hacer frío. Y eso exige políticas responsables, no abandono”, concluyó.