El Gobierno de La Rioja reglamentó la Ley Provincial Nº 10.464, que establece un nuevo marco legal para el funcionamiento de la Reserva Natural Urbana Takú, de 25 hectáreas de bosque nativo y destacada en la región. Según el Decreto Nº 705, que se conoció a través del Boletín Oficial, se dio cumplimiento a lo dispuesto en el artículo 68 de la Constitución Provincial y se formalizaron las medidas normativas imprescindibles para la preservación del área protegida.
Según informaron desde la provincia, la norma designa a la Unidad de Enlace para el Ordenamiento Territorial y el Desarrollo Local como nueva autoridad de aplicación, un organismo que tendrá facultades para dictar normas y actos administrativos, además de promover la participación ciudadana y garantizar una gestión eficiente de la Reserva.
Las actividades permitidas —educativas, culturales, científicas, recreativas y de vigilancia o recuperación ambiental que se realizan en la zona— deberán ser compatibles con la conservación del entorno. También, todas ellas requerirán un permiso gratuito previo, que será solicitado por escrito y acompañado de un programa detallado de acciones.
La regulación para el cuidado de la naturaleza riojana
El decreto al mismo tiempo contempla sanciones para quienes infrinjan las disposiciones de la ley, con acciones legales como multas y decomisos para los casos de extracción de minerales, piezas arqueológicas o componentes del ecosistema. En ese marco, las penas que se apliquen se graduarán según los parámetros establecidos en el artículo 12 de la Ley 10.464.
Los responsables del área enfatizaron que este paso es un avance significativo en la consolidación de políticas ambientales en la provincia de La Rioja y refuerza el compromiso provincial con la protección de sus reservas naturales y la participación comunitaria en su cuidado.
Reserva Takú, una maravilla riojana
Se creó por Ley provincial 10.464 y está ubicada en cercanías al Parque de la Ciudad de La Rioja (zona oeste). En sus 25 hectáreas conviven no solo las especies arbóreas del Monte o Chaco Seco si no también las aves y la fauna que pertenecen a la misma ecorregión. Cabe señalar que el sitio está en estado de recuperación y de obras todo el tiempo, debido a la erosión antrópica que hubo durante más de cuarenta años.
La zona se puede visitar en modalidad senderismo, cicloturismo o simplemente disfrutar del espacio para el descanso. Asimismo, puede que haya zonas que no estén habilitadas y sean peligrosas para realizar actividades o simplemente paseos. La denominación reservas urbanas se encuentra dentro de las nuevas nomenclaturas de aquellos espacios para la preservación de las especies autóctonas, además de que mitiga las distintas formas de contaminación en zonas o áreas urbanas o suburbanas.