La Rioja registró niveles moderados de ocupación hotelera durante el último fin de semana XXL por el Día de la Soberanía Nacional, con porcentajes que oscilaron entre el 30% y el 40% según el relevamiento de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Aunque por debajo de los destinos más masivos del país, la provincia volvió a posicionarse como una opción elegida en el mapa turístico nacional, con el Parque Nacional Talampaya como gran protagonista.
De acuerdo al informe de CAME, el feriado de cuatro días dejó un saldo positivo en todo el país: se movilizaron 1.694.000 turistas, un 21% más que en el mismo fin de semana largo de 2024. A nivel nacional, la estadía promedio fue de 2,3 noches, un 15% superior al año pasado, impulsada por la extensión del descanso y por un clima templado que favoreció las escapadas. El gasto promedio diario por turista fue de $91.317, con un consumo más austero, pero sostenido en rubros básicos como alojamiento, gastronomía y transporte.
En el caso de La Rioja, el nivel de reservas fue calificado como “moderado”. La ciudad capital alcanzó alrededor del 30% de ocupación, mientras que Chilecito y Villa Unión se ubicaron en torno al 40%. La mayoría de los visitantes fueron turistas internos, es decir, oriundos de la propia provincia, que aprovecharon la agenda de actividades y propuestas locales para movilizarse dentro del territorio riojano.
El gasto promedio diario por persona en la provincia fue de $85.000 y la estadía promedio llegó a los dos días. Si bien se trata de cifras por debajo del promedio nacional, muestran un flujo turístico que, aunque acotado, dinamizó economías regionales vinculadas a la hotelería, la gastronomía, el transporte y los servicios turísticos.
Como en los últimos años, el Parque Nacional Talampaya volvió a ser la gran estrella del fin de semana largo. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, el área protegida recibió visitantes que recorrieron sus cañones rojizos, formaciones monumentales y circuitos paleontológicos, consolidándolo como uno de los atractivos naturales más importantes del país.
Además, se registró movimiento en otros clásicos del turismo riojano, como la Cuesta de Miranda, célebre por su ruta escénica entre montañas rojizas; la Laguna Brava, con sus paisajes de altura, salares y flamencos andinos; y La Mejicana, donde los turistas pudieron conocer el histórico cable carril y los circuitos vinculados a la minería.
Con estos números, La Rioja se suma al balance general positivo del fin de semana XXL, que dejó un aumento del 34% real en el gasto total de los turistas frente al mismo período de 2024. Aunque la ocupación no fue plena, el flujo constante de visitantes internos y nacionales ratifica el potencial de la provincia como destino de naturaleza, historia y paisajes únicos en el Noroeste argentino.
