Cura argentino en Gaza pide ayuda humanitaria: "Falta de todo"

El único sacerdote argentino en la región reclamó que llegue asistencia para familias con ancianos y niños que necesitan "cosas esenciales para la vida" como agua, comida y medicamentos.

23 de mayo, 2025 | 10.09

Desde una Franja de Gaza azotada a diario por bombardeos del Ejército de Israel, el sacerdote argentino Gabriel Romanelli describió como "gravísima y crítica" la situación que atraviesa la población y denunció que "hace casi 3 meses no entra ayuda humanitaria" en una zona del medio oriente donde "en todos lados falta de todo". El padre advirtió que "hay gente viviendo en la nada" y pidió el cese de un conflicto que ya dejó la cruenta cifra de "17 mil niños muertos".

"La situación es gravísima, es crítica. En Gaza vivimos mas de 2 millones de personas, un poco menos de la mitad estamos en Gaza. Hace casi 3 meses no entra nada de ayuda humanitaria. Mientras, continúa la guerra, los bombardeos constantes, destrucciones y muertes. En todos lados falta de todo", dijo Romanelli en diálogo con El Destape 1070

El padre, que lleva más de dos décadas en la región, aseguró que "hay gente viviendo en la nada" y que "tiene necesidad de todo, desde agua a medicamentos". "Son las cosas esenciales para la vida, incluso medicamentos para enfermedades crónicas, quienes tienen diabetes, cáncer y los miles de heridos. Además de terminar la guerra, el cese al fuego y el intercambio de prisioneros, la ayuda humanitaria es absolutamente necesaria. Hay mas de 2 millones de personas", se quejó.

Romanelli contó que las familias viven en las ruinas de sus hogares "racionando" lo que les quedó y advirtió tanto por los "centenares de miles de personas que han sido evacuadas" como por la cantidad de muertes a manos del Ejército israelí. "Hay más de 17 mil niños que han muerto", alertó, y remarcó que "la Franja de Gaza está triturada".

Quién es el argentino a cargo de la única iglesia católica en Gaza

La única iglesia católica en todo el territorio, que desde hace años es un refugio y un símbolo de esperanza para la región, está a cargo del sacerdote Romanelli, quien, a pesar de las dificultades y el contexto bélico, continúa con su labor pastoral y humanitaria.

Oriundo del barrio porteño de Villa Luro, Romanelli pertenece al Instituto del Verbo Encarnado (IVE), una congregación argentina que tiene presencia en varios países de Medio Oriente. A sus 54 años, lleva más de 28 viviendo en la región, con una experiencia que lo llevó desde Egipto y Jordania hasta su actual destino en Gaza. 

Como párroco de la Iglesia de la Sagrada Familia, Romanelli tiene bajo su cuidado a una pequeña comunidad cristiana, que incluye tanto católicos como ortodoxos. La iglesia, ubicada en el corazón de Gaza, sirve no solo como un lugar de culto, sino también como un refugio para quienes buscan huir de la violencia que azota desde hace ya tiempo la región.