La Fiscalía General de Brasil pidió este martes condenar al ex presidente Jair Bolsonaro y a siete de sus antiguos colaboradores por el intento de golpe de Estado contra su sucesor Luiz Inácio Lula da Silva, según informaron fuentes oficiales. Lo solicitó ante la Corte Suprema el fiscal general Paulo Gonet, quien señaló que hay "un amplio conjunto de pruebas", que incluye manuscritos, archivos digitales, intercambio de mensajes y planillas que revelan "la trama conspiratoria contra las instituciones democráticas".
De ser condenados, la pena para Bolsonaro y el resto de imputados, entre los que se encuentran antiguos ministros de su Gobierno (2019-2022) y militares de alto rango, podría oscilar entre los 12 y los 40 años de prisión, según explicaron fuentes judiciales.
Gonet imputó a los acusados por cinco delitos en total: golpe de Estado, organización criminal armada, tentativa de abolición violenta del Estado democrático de derecho, daño cualificado por violencia grave o amenaza y deterioro de patrimonio protegido.
Además, según la Fiscalía, los interrogatorios realizados a lo largo de la causa evidenciaron la participación de los acusados en "una organización criminal" que buscó "impedir el funcionamiento de los poderes y derrocar un gobierno legítimamente electo, además de la destrucción de edificios públicos", tal como indicó la Fiscalía en una nota.
Cómo sigue el juicio de Bolsonaro y sus presuntos colaboradores en la causa
Gonet vinculó de manera directa a Bolsonaro y a los otros siete acusados con los episodios del 8 de enero de 2023, una semana después de la investidura de Lula, en la que miles de simpatizantes de ultraderecha vandalizaron las sedes del Supremo, el Congreso y la Presidencia para forzar una intervención de las Fuerzas Armadas que apartase del poder al dirigente progresista.
A partir de las pruebas que presentó, el fiscal general concluyó que los ochos acusados orquestaron acciones para garantizar su "permanencia autoritaria en el poder a través de tentativas de ruptura violenta del orden democrático".
El caso contra Bolsonaro y sus más estrechos colaboradores tramita en la Primera Sala del Supremo, que ya cerró la fase de instrucción. Y ya presentados los alegatos finales de la Fiscalía, resta esperar el turno ahora de los imputados de presentar sus posiciones al respecto. Después de esa instancia, el juicio entrará en su etapa final y quedará listo para sentencia, lo cual en el propio tribunal se prevé que puede ocurrir entre septiembre y octubre de este año.
Además del juicio contra estos ocho acusados, apuntados como los líderes de la trama golpista, están pendientes de juicio otros treinta sospechosos.
Con información de EFE.