Moto Harley Davidson: este es el robusto modelo que Pappo conducía en su trágico accidente

El guitarrista Norberto “Pappo” Napolitano falleció en 2005 a bordo de una Harley Davidson. Un repaso por la mecánica y el diseño de la motocicleta que lo acompañó en sus últimos instantes.

09 de septiembre, 2025 | 22.05

La noche del 25 de febrero de 2005 quedó grabada en la memoria de la música argentina: Norberto “Pappo” Napolitano perdió la vida en un accidente vial en Luján mientras conducía su Harley Davidson, la marca que había adoptado como símbolo personal y de estilo de vida. Aquel siniestro truncó la trayectoria del legendario guitarrista de blues y rock, pero también dejó en la memoria colectiva la imagen de Pappo sobre una moto icónica del mundo del motociclismo.

La Harley Davidson que conducía era una de las tantas unidades del estilo custom cruiser, reconocida por su robustez, sus líneas clásicas y su motor de gran cilindrada. Harley, desde su fundación en 1903, se convirtió en un sinónimo de libertad y potencia sobre dos ruedas, y ese espíritu encajaba perfectamente con la figura rebelde de Pappo.

El modelo en cuestión pertenecía a la familia Softail, una gama de motocicletas caracterizada por mantener la estética clásica de los años 50 pero con tecnología moderna. El chasis ocultaba la suspensión trasera bajo el basculante, dando la impresión de rigidez mientras ofrecía comodidad en el manejo. Este diseño permitió combinar tradición y confort, algo que enamoró a motociclistas de todo el mundo.

En cuanto a la mecánica, la Harley Davidson de Pappo estaba equipada con un motor V-Twin a 45 grados, refrigerado por aire, de alrededor de 1.450 cc de cilindrada. Este propulsor, denominado Twin Cam 88, era capaz de entregar una potencia cercana a los 65 caballos de fuerza y un torque que superaba los 110 Nm, suficiente para garantizar aceleraciones contundentes y un andar con carácter. Su transmisión de cinco velocidades y la clásica correa dentada de tracción final completaban una configuración que priorizaba la confiabilidad y la experiencia de conducción.

El diseño de la moto resaltaba por sus guardabarros envolventes, el depósito de combustible en forma de lágrima y un manillar ancho, características propias del estilo cruiser norteamericano. Los cromados, las superficies pulidas y la impronta robusta convertían a estas Harley en una declaración de estilo tanto como en una máquina de transporte.

En términos de confort y seguridad, el modelo incluía frenos de disco en ambas ruedas, aunque en aquella época aún no se ofrecía de serie el ABS en todas las versiones. Su peso superaba los 300 kilos en orden de marcha, lo que exigía pericia y respeto al momento de manejarla, sobre todo en maniobras rápidas o en condiciones adversas de la ruta.

Para Pappo, sin embargo, la Harley Davidson no era solo un vehículo: era un emblema personal. Se lo veía con frecuencia en reuniones de motociclistas y en encuentros del mítico “Hell’s Angels” local, siempre identificado con ese universo de cuero, motores rugientes y rutas abiertas.

La tragedia de 2005 selló para siempre el vínculo entre el Carpo y la motocicleta estadounidense. La Harley Davidson en la que murió no solo simboliza su pasión por las máquinas poderosas, sino que quedó como parte inseparable de la mitología de un artista que vivió —y murió— al ritmo de la velocidad y el rock.