Friedrich Merz emprende este jueves su primer viaje a Londres como canciller alemán para firmar un amplio tratado de amistad con el primer ministro británico, Keir Starmer, en el marco de una iniciativa más amplia para restablecer la relación de la Unión Europea con Reino Unido.
La estancia de un día de Merz sigue a una visita de Estado de tres días a Reino Unido del presidente francés, Emmanuel Macron, lo que señala una mayor cooperación entre las tres principales potencias de Europa en un momento de amenazas al continente e incertidumbre sobre su aliado estadounidense.
Europa se enfrenta a los nuevos aranceles estadounidenses desde que el presidente Donald Trump regresara a la Casa Blanca, así como a dudas sobre el compromiso de Estados Unidos de defender a sus aliados europeos, incluida Ucrania ante la invasión de Rusia.
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"El acuerdo llega en un momento en el que, como europeos, se nos desafía particularmente en términos de política de seguridad", dijo un representante del Gobierno alemán en una sesión informativa antes del viaje.
"En el preámbulo no se dice que los asuntos transatlánticos también están, digámoslo así, en transformación. Esto también forma parte del contexto", añadió.
Alemania solo tiene tratados de amistad de este tipo con unos pocos países, como Francia, lo que simboliza la cercanía de sus lazos.
Casi una década después de que Reino Unido votara a favor de abandonar la Unión Europea, el tratado incluye una cláusula de asistencia mutua que, "a la luz de la guerra de agresión rusa contra Ucrania, es muy significativa", dijo el representante.
Se basa en un acuerdo de defensa alcanzado el año pasado que incluía el desarrollo conjunto de armas de ataque de largo alcance y llega después de que Francia y Reino Unido acordaran la semana pasada reforzar la cooperación sobre sus respectivos arsenales nucleares.
Como parte del anuncio del jueves, Reino Unido y Alemania se comprometerán a "llevar a cabo campañas conjuntas de exportación" para conseguir pedidos de otros países de equipos que fabrican conjuntamente, como el avión de combate Typhoon Eurofighter y el vehículo blindado Boxer.
Esto podría contribuir a aumentar las ventas, y representa un cambio significativo respecto a los diez años anteriores, cuando Alemania impidió que Arabia Saudí y Turquía compraran Typhoons.
Los Typhoon son fabricados por un consorcio de empresas europeas, entre las que se encuentran BAE Systems en Reino Unido y Airbus en Alemania, de cuyos pedidos a diferentes países son responsables distintos Gobiernos socios; el Boxer es fabricado por una empresa conjunta germano-británica, Rheinmetall BAE Systems Land.
Para estrechar aún más los lazos, una empresa alemana de tecnología de defensa, Stark, también ha acordado construir una nueva fábrica en Reino Unido, la primera instalación de producción fuera de Alemania, para crear sistemas no tripulados impulsados por inteligencia artificial.
Más allá de la defensa, el tratado también incluirá un acuerdo para combatir conjuntamente el contrabando y el tráfico de seres humanos, dijo el representante alemán, atendiendo a una demanda clave del Gobierno de Starmer, que está bajo presión para demostrar que puede controlar la migración.
El Gobierno de Reino Unido dijo que Alemania se comprometería a prohibir la facilitación de la inmigración ilegal a Reino Unido con un cambio legislativo que se aprobaría este año.
Esto daría a las fuerzas del orden las herramientas para investigar los almacenes y depósitos utilizados por los traficantes de migrantes para ocultar peligrosas embarcaciones pequeñas destinadas a travesías ilegales a Reino Unido, dijo en un comunicado.
Con información de Reuters
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