Los trabajadores de la empresa Molinos Río de la Plata celebraron este sábado haber conseguido un acuerdo para frenar cualquier despido de empleados durante los próximos 18 meses. Así lo comunicaron tras una extensa negociación entre la compañía, la Comisión Interna de la planta de Esteban Echeverría y el Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA).
“Este acuerdo se logró gracias a la lucha de las y los compañeros de la fábrica, con los delegados a la cabeza, para frenar el plan de despidos de una compañía que pertenece a los Pérez Companc, una de las familias más ricas del país”, sostuvo el delegado Luciano Greco.
Este entendimiento, aprobado por amplia mayoría en las asambleas de los tres turnos de la planta, contempla además el pago de un sueldo bruto extra a quienes no prestarán tareas los sábados por la tarde durante ese período, según los trabajadores.
“Después de una extensa negociación, que incluyó asambleas para analizar las propuestas patronales y diferentes medidas de fuerza, logramos llegar a este acuerdo, pero aún nos queda continuar la pelea por la reincorporación de los despedidos”, agregó Greco.
La medida fue impulsada por la Comisión Interna luego que la empresa anunciara, el pasado 9 de mayo, un ajuste que incluía despidos, reducción de dotaciones de personal y una baja salarial "a los costos de mercado".
Cuál es el conflicto en Molinos
En marzo, la empresa difundió su balance anual del 2024, en el que reconoció una caída del 6,4% en sus ingresos, con un desplome de la ganancia neta en torno al 67%. En un nuevo estudio de sus finanzas internas, la compañía obtuvo un resultado negativo en el primer trimestre del 2025. Fue el 9 de mayo cuando, con el argumento de esta presunta crisis interna, Molinos anunció despidos, una reducción en las dotaciones de personal y su intención de rebajar los sueldos.
La situación se agravó el 26 de mayo con una nueva reducción de personal dispuesta por la empresa y se profundizó el 17 de junio, tras el despido de seis trabajadores, hecho que desencadenó un paro por tiempo indeterminado por parte de los empleados de Molinos Río de la Plata y la Comisión Interna, convocado por el STIA filial Buenos Aires.
Durante el transcurso del paro, la empresa procedió al despido de otros cuatro trabajadores y, el 18 de junio, el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires dictó la conciliación obligatoria.
Desde entonces la compañía y la comisión interna, que fue reelecta el 3 de septiembre pasado por el 72% de los votos, entró en las negociaciones que derivaron en el acuerdo recientemente firmado.