El presidente Javier Milei volvió a los agravios. Este lunes quien recibió la agresión fue el economista Emmanuel Álvarez Agis. Milei se cruzó con un recorte malicioso de una entrevista que el director de la consultora PxQ le dio a El Destape 1070 el jueves último y no necesitó nada más para desatar su furia: "Kirchnerista = ladrón", posteó el Presidente en la red social X. "Álvarez el Chorro", "Álvarez el Gil", le diría luego, para ponerse a discutir con su habitual hombre de paja, un recurso más que habitual en él: distorsionar el argumento de la otra persona para que su ataque sea más fácil y vistoso. Pero vayamos por partes:
1. La propuesta de Agis
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El jueves último, en Batalla Cultural, Álvarez Agis analizó –entre varias, dado que la entrevista fue extensa– la situación de la informalidad en la Argentina y dejó el título de una propuesta novedosa con la que él cree el Estado podría combatir parte de la economía no registrada. Sobre el minuto 27 de la entrevista, y evaluando herramientas para que la Argentina deje de ser una economía eminentemente no bancarizada, señaló: "Yo soy muy promotor de los esquemas de palo y zanahoria. Yo creo que tenés que tener un palo para combatir la informalidad. Creo que hay que cobrar un impuesto al efectivo, de manera tal de que el consumidor sea el que induzca al comercio a blanquearse. ¿Cómo sería eso? Voy al cajero, pido mil y salen novecientos. Entonces, cuando me doy cuenta de que pasa eso, voy al kiosco y le digo: No, cobrame con tarjeta, con billetera virtual, con QR, etcétera. Luego, lo único que tiene que hacer Arca es mirar que si hay un tipo que recibe transferencias de 134 CUITs por día y darse cuenta de que eso se llama comercio y no que tenés una familia grande que te ayuda".
Además, agregó: "Arca tiene que obligar a las billeteras virtuales a ser agente de retención, como yo soy agente de retención en mi compañía o como una estación de servicios es agente de retención del impuesto a los combustible. Eso, complementado con un esquema impositivo más laxo para no fundir al comercio que se va a tener que formalizar. El palo es el impuesto al efectivo y la zanahoria es un monotributo empresarial, un impuesto sencillo, bajo, de manera tal de que el comercio se pueda formalizar barato y le convenga formalizarse".
2. El hombre de paja con el que discute Milei
El Presidente, probablemente, no haya escuchado ni conocido en profundidad, dado que posteó un recorte de catorce segundos de una respuesta que se extendió por más de dos minutos en una conversación que en total tuvo 40 minutos. Tal vez por eso, la respuesta de Milei fue: "KIRCHNERISTA = LADRÓN. El que fue viceministro de economía de Kicillof propone de modo abierto robarte el 10% de tus ingresos que destines al consumo. Jamás piensan en achicar el gasto sino sólo en como recaudar más para ser ellos quienes deciden cuánto y en qué gastar tu dinero." Milei elige discutir con un argumento que no es el de Agis.
Afectado por la propuesta, o tal vez deseoso de mantener un intercambio acalorado con un adversario construido a su gusto, Milei siguió en otro posteo: "¿Qué diferencia hay entre la propuesta y que un chorro te espere a la salida de un cajero y te robe el 10%?" En ningún momento rebatió o presentó ideas que discutan con el argumento original.
Se sumaron también (¿cómo no?) desde el equipo económico. "Locura. ¡Realmente no aprenden! Se requiere creatividad para concebir una idea tan tóxica y destructiva", dijo el viceministro José Luis Daza, quien evaluó que la propuesta "desincentiva la bancarización" y "fomenta la evasión". Es llamativo lo que entendió el viceministro. Exactamente lo contrario de lo que dijo Agis.
3. Una propuesta integral
Para no aumentar la presión tributaria, además, Agis propuso eliminar el Impuesto al Cheque, que en este esquema sería reemplazado por el impuesto al efectivo. La propuesta apunta entonces a incentivar la formalización general, trasladando la demanda de operaciones digitales al consumidor final. Un esquema similar al que impulsó el Estado desde la AFIP con la campaña para extender el uso de las tarjetas de débito. Plan que incluyó también la obligatoriedad por parte de los bancos de bajar comisiones y costos para los consumidores.
4. Un debate que merece profundidad y no discutir con recortes
Las estimaciones públicas y privadas hablan de un nivel de evasión de entre el 40% y 50% en la economía argentina. Eso engloba realidades muy diferentes entre sí. Desde el comercio pequeño que no declara ingresos hasta el gran inversor que crea redes inextricables de empresas en paraísos fiscales en el exterior. El nivel de evasión es altísimo no sólo en sí mismo sino también puesto en relación con lo que sucede en países con economías similares. Hay sectores específicos con altos niveles de evasión, como la economía de plataformas, las cadenas de gimnasios y el sector agropecuario, entre otros. También es grave la no registración laboral y la evasión de los aportes y contribuciones que los empleadores deben hacer cuando contratan trabajadores.
Para la evasión tributaria, el gobierno de Milei no ha ofrecido aún una propuesta. La expectativa es que esa iniciativa llegue en la reforma tributaria que prepara su gobierno, aunque aún no ha trascendido ninguna idea surgida de ese proyecto que apunte a entrar en un camino gradual de formalización de la economía.
Para la evasión laboral, en cambio, el Gobierno hace un año que logró que el Congreso le apruebe su propuesta. Eliminó las multas (el "palo" del que hablaba Agis) a los empleadores que no le hagan los aportes a los trabajadores. ¿Qué consiguió? El empleo no registrado sigue creciendo y marcó 37,7% en la última medición, el nivel más alto en dos años.
Los problemas de la economía argentina son de una magnitud tal que va siendo la hora de escuchar ideas diferentes y discutir con honestidad.
