La vida de Martín Gonzalo Cáceres cambió de manera rotunda en la madrugada del domingo 16 de marzo, cuando el joven de 24 años fue brutalmente golpeado a la salida de una fiesta organizada por un grupo de jugadores de rugby del club Córdoba Athletic. A ocho meses del ataque que lo dejó en estado crítico, familiares y amigos volvieron a manifestarse este lunes en el centro de Córdoba, bajo la consigna de una “Marcha de concientización”.
La marcha tuvo un recorrido que partió desde Cañada y Colón para culminar en el Patio Olmos. La familia explicó que el objetivo es mantener el caso presente y reforzar un mensaje de no violencia. “Se cumplen 8 meses del ataque que sufrió mi hermano. Esto lo realizamos con el fin de concientizar para que esto no pase más. Pedimos que esto se eleve a un juicio oral público, esperando que ya se cierre la investigación”, afirmó Nicolás, el hermano de Martín.
De acuerdo a la reconstrucción oficial, la situación se habría desencadenado durante una discusión de su amigo Alejo y jóvenes cercanos a Agustín Fasulo. Este enfrentamiento verbal elevó su temperatura y Cáceres intervino para separarlos. Sin embargo fue arremetido por la espalda, lo que provocó que cayera al piso. Una vez en el suelo sufrió golpes en distintas partes de su cuerpo, incluyendo la cabeza. Desde aquel fatídico día, el joven permanece internado en grave estado con "apenas un 2% de posibilidades de sobrevivir", según el reporte médico que le dieron a los padres.
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Hace algunas semanas, la Justicia ratificó la prisión preventiva para Fasulo, acusado de haber atacado a la víctima a la salida del boliche Kabana, en la zona del Chateau. Semanas atrás, el detenido habló con Noticiero Doce y sostuvo “que el causante de su estado fue otra cosa”, aunque reconoció haber participado en la pelea. “Sí, asumo que yo peleé y todo, pero no soy responsable de la salud actual de Martín”, aseguró.
Los familiares de la víctima reclaman el cambio de carátula a tentativa de homicidio, como así también el juicio oral y público. “Hoy tenemos a Martín postrado en una cama”, dijo Lidia, mamá del joven golpeado. La mujer había contado que su hijo estuvo internado en cuatro centros de salud diferentes desde entonces. Los primeros meses los pasó en el Sanatorio Parque y luego tuvo que alternar entre dos sucursales de la clínica Vélez Sarsfield y el centro de rehabilitación INER.
La repudiable justificación del padre del presunto agresor de Martín Cáceres: "Piñas de ambos lados"
En octubre pasado, Ariel Fasulo, padre del aprehendido, habló por primera vez tras el suceso violencia y defendió de manera polémica la inocencia de su hijo, que se encuentra en la cárcel de Bouwer cumpliendo prisión preventiva. “Consideramos que las lesiones trágicas y lamentables de Martín no fueron provocadas por Agustín. Estoy absolutamente convencido de eso mientras los peritos no demuestren lo contrario”, afirmó.
Fasulo minimizó la pelea y las consecuencias que los golpes le provocaron a Cáceres. “Agustín asume que discutió con Martín, hubo un empujón y dos piñas de cada lado. Ahí se separaron. Martín no se cayó, siguió con su grupo”, dijo. También sugirió que los resultados toxicológicos podrían aportar datos sobre el cuadro que presentó la víctima horas después. En esa línea, el padre del acusado sostuvo: “Ruego a Dios que Martín se ponga bien, pero la prisión preventiva de Agustín es injusta, no fue su intención”. “Fue un ‘uno a uno’, no una patota. Los culpo a los dos en un 50% por meterse en una pelea que no era de ellos”, aseguró.
Si bien aseguró que intentaron acercarse a la familia de la víctima, aclaró que no tuvieron respuesta positiva. “El abogado nuestro les consultó si querían que nos llegáramos y la mamá dijo que por el momento no. Por respeto, no insistimos”, dijo en diálogo con Noticiero Doce. Luego, contó que desde hace meses reciben mensajes agresivos por redes sociales de parte de un hermano de la víctima y que su esposa está con tratamiento psicológico por ataques de pánico.
El abogado defensor, Julio Herrera Martínez, afirmó días atrás que buscarán que Agustín Fasulo recupere su libertad hasta que se dicte un veredicto en el juicio final. Mientras las justificaciones por parte del lado de Fasulo carecen de empatía, Martín continúa postrado en la cama de un hospital.
