Droga, un audio y un "jefe" encima de Pequeño J: la hipótesis de que hay otras bandas alrededor del triple femicidio

Mientras avanza la investigación principal, varios abogados coinciden en que debería desprenderse una investigación federal y avanzar con otros grupos alrededor de los asesinos de Morena, Brenda y Lara. Tirones por las especulaciones alrededor de la causa que sigue bajo secreto de sumario.

02 de octubre, 2025 | 21.39

Poco después de que encontraran los cuerpos de Brenda, Morena y Lara enterrados en el patio de una casa de Florencio Varela y tras las primeras detenciones en la causa, la hipótesis de los investigadores empezó a rondar sobre la posibilidad de un robo de drogas y dinero vinculado a una banda narco liderada por un delincuente peruano que sentaba sus bases en la Villa 1 - 11 - 14 del Bajo Flores y la Villa Zavaleta entre Barracas y Nueva Pompeya. Así, el expediente sumó los nombres de Matías Ozorio, detenido en Perú que llegará a Buenos Aires en la noche de este jueves, y Tony Janzen Valverde Victoriano, conocido como “Pequeño J” y empezó a tejer una historia alrededor de cómo llegó el acusado de instigar los crímenes al país y cómo formó la banda que quiso ganar terreno en el narcomenudeo y cometió el brutal triple narco femicidio.

Así, en la investigación se empezó a trabajar en la hipótesis de que la menor de la joven, de apenas 15 años, era explotada sexualmente y allí conoció a un hombre que fue víctima de un robo bajo una modalidad similar a la de viudas negras en una casa de donde se llevaron droga y dinero. El abogado Guillermo Endi, que representa a dos detenidos en la causa, aseguró que “el robo fue de poco menos de 400 kilos” pero fuentes cercanas a la investigación aseguraron a El Destape que “se investiga la hipótesis del robo desde el primer momento pero no existe en el expediente hasta el momento una cifra ni mucho menos la cantidad de la que habla el abogado”.

Pese a esa aclaratoria, las mismas fuentes aseguraron que no descartan que la banda que aseguran lideraba “Pequeño J” tenga una banda o jefes por encima, y que ellos estaban ayudando al hijo del ex líder de la banda peruana a establecer redes en Argentina, pero un posible robo lo dejó mal parado y por eso llevaron adelante el brutal triple crimen. De la misma forma, los investigadores buscan establecer cómo se originaron los nexos de la banda y que roles ocuparon los detenidos, ya que entienden que no fue una banda “que se juntó para secuestrar y matar a las chicas” sino que formaban parte del ámbito delictual y del narcomenudeo que terminó metido en el brutal triple narco femicidio.

Además se conoció un audio que Tony Janzen Valverde Victoriano le envió a su novia donde señala: “Me tengo que dejar humillar y yo nunca tuve que humillarme por nadie” para luego sentenciar “los tíos me cobran, pum me quitan mi plata y se van”. Este relato pone en foco para algunos investigadores que “Pequeño J” tenía “superiores” en la banda o que estaba respondiendo a alguien que le exigía dinero por la mercancía. Así, vuelven a escena algunos líderes de bandas mayores que podrían ser los proveedores del joven peruano y que le estaban reclamando algo que esa banda no podía entregar.

Ahora, con el foco puesto en la posibilidad que un robo haya desencadenado en la brutal venganza y el triple narco femicidio, la Justicia deberá establecer los roles y buscar las conexiones para conocer si hay jefes o superiores de “Pequeño J” que hayan sido también instigadores y se pueda responder el reclamo de las familias de Morena, Brenda y Lara para que todos los responsables paguen sus crímenes.