La ciudad de Tres Arroyos sigue conmocionada por un aberrante hecho que comenzó con un femicidio en una casa del barrio Villa Italia y terminó sobre la ruta 228, en las afueras de San Cayetano. La autopsia reveló que Fernando Dellarciprete (40) degolló a su esposa, Rocío Villarreal (35), quien murió desangrada por el corte en el cuello, y luego se quitó la vida tras ahogar a sus dos hijos en un zanjón.
Dellarciprete era camionero y trabajó años en una empresa que comercializa cervezas. El informe detalló que se encontraba bajo tratamiento psiquiátrico, y había acordado una próxima internación voluntaria.
La reconstrucción inicial de los investigadores estableció que Fernando perpetró el femicidio de Rocío posiblemente durante la mañana. El cuerpo de la mujer fue encontrado por familiares que ante la falta de respuestas se acercaron a la vivienda de la calle Larrea y encontraron el cuerpo apuñalado de la mujer en el comedor. El hallazgo fue pasadas las 17 y ahí cruzaron información con lo ocurrido en la ruta.
Luego de asesinar a su esposa, Dellarciprete tomó el auto familiar, una Renault Duster, y escapó con sus hijos Tiziano, de 8, y Francesco, de 4 años, tomando la ruta con sentido a Necochea. En medio del camino, y tras ahogar a sus hijos, intentó estrellar su vehículo a la vera del camino para suicidarse, según sostuvo el medio Ecos Diarios.
Además, los investigadores sumaron a esta escena el relato de unos campesinos que aseguraron que el hombre se acercó al lugar pidiendo agua y luego pidió un arma porque tenía intenciones de quitarse la vida. Esas declaraciones se esperan que sean ratificadas ante la Justicia en las próximas horas. Minutos más tarde, tras ser echado por los campesinos, Dellarciprete se arrojó frente a un camión Mercedes Benz, entre el kilómetro 69 y 75 de la ruta.
El chofer del vehículo contra el que se arrojó el femicida y homicida contó a los agentes policiales que el hombre se lanzó intencionalmente al paso del vehículo. Jonathan Luna manifestó que “estaba viajando desde Tres Arroyos hacia el lado de Necochea cuando el hombre se tiró contra el camión” y aseguró no pudo "hacer nada”, ya que la secuencia fue muy rápida y no tuvo posibilidad de reacción.
Ahora, los investigadores secuestraron un equipo de grabación de cámaras de vigilancia de la casa donde encontraron el cuerpo de Rocío y el teléfono celular de la mujer. Además, en un primer relevamiento, los investigadores descartaron que existan denuncias de violencia de género mientras esperan la declaración de algunos familiares y docentes de la Escuela Agropecuaria, donde acudían los pequeños, que suspendió las clases tras la trágica noticia.
Tras conseguir esos datos, los investigadores se centraron en analizar tres puntos claves que son la casa de Tres Arroyos, el campo por el que cruzó el canal y lugar exacto del suicidio. “Homicidio seguido de suicidio”, es la carátula de la causa que quedó en manos de la UFI Número 3 de Necochea, mientras que el femicidio de Villarreal lo tiene a su cargo la UFI Número 6 de Tres Arroyos.
Entre 10 y 12 cuchillazos y un intento de escape: los estremecedores detalles de las autopsias de la masacre de Villa Crespo
El triple crimen de Tres Arroyos se asemeja al recientemente ocurrido en Villa Crespo, ya que ambos fueron perpetrados por un miembro de la familia que, tras asesinar a sus seres queridos, se quitó la vida. Luego de que las autopsias de los cuerpos revelaran que Laura Leguizamón fue la autora del homicidio de su esposo, Bernardo Adrián Seltzer, y de sus hijos Ian (15) e Ivo (13), en su departamento del barrio porteño de Villa Crespo, nuevos detalles estremecedores salieron a la luz. Los médicos forenses constataron que el hombre tenía tres puñaladas, mientras que los chicos recibieron por lo menos entre 10 o 12 cuchilladas cada uno.
Después de varias horas, los peritos concluyeron con la necropsia a los cuatro cuerpos y, según informaron, se constató que Leguizamón fue quien llevó a cabo los brutales asesinatos de los integrantes de su familia. El fiscal César Troncoso, de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional, intervino en el caso y lo caratuló como "triple homicidio calificado, seguido de suicidio".
Investigadores confirmaron el secuestro de una serie de medicamentos, una caja vacía sin blíster, de sertralina rospaw 50 mg; una caja midax 10, olanzapina 10 mg; conteniendo dos blíster con siete pastillas y un blíster con cinco pastillas. Según la hermana de la mujer, la asesina atravesaba un tratamiento psiquiátrico como consecuencia de un brote psicótico.
Según pudieron reconstruir los peritos, cerca de las 6 de la madrugada de este miércoles, Leguizamón mató a su esposo en el dormitorio matrimonial, mientras dormía. La escena en el departamento 6A de la calle Aguirre al 200 fue macabra: la empleada doméstica que trabajaba para la familia encontró los cuatro cuerpos tirados en diferentes ambientes de la vivienda, con varias heridas y cubiertos en sangre. La mujer denunció el hecho y relató que, hace una semana, su jefa había dejado de ser la misma: creen que había dejado de tomar su medicación.
Fuentes del caso confirmaron la secuencia del triple crimen perpetrado por Leguizamón: “Primero mata al marido, luego va a la pieza. Los nenes dormían en cuchetas y uno sale corriendo herido y lo termina rematando en el comedor”, mientras que el otro hijo “quiere correr a la pieza y lo mata en el pasillo”, describieron.
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