Lo que parecía una excavación más terminó convirtiéndose en uno de los descubrimientos arqueológicos más importantes de los últimos años en Escandinavia. Durante una serie de tareas realizadas entre 2021 y 2022 a lo largo de la autopista E18, en la región sueca de Västmanland, un equipo de arqueólogos encontró restos que estaban escondidos desde hacía siglos: tumbas, túmulos, objetos de lujo y estructuras domésticas que arrojan nueva luz sobre cómo vivían y morían los vikingos en el centro de Suecia.
El proyecto, liderado por Arkeologerna, la división arqueológica de los Museos Nacionales de Historia del país, permitió identificar nueve zonas de gran valor histórico. Los sitios comprenden desde cementerios y plataformas de cremación hasta antiguos asentamientos rurales que datan de la Edad del Hierro y llegan hasta los primeros tiempos del cristianismo.
En este sentido, uno de los descubrimientos más sorprendentes apareció en Rallsta, cerca de Hallstahammar. En lo alto de una colina, el equipo halló un área de cremaciones de dimensiones monumentales. Según explicó Fredrik Larsson, líder del proyecto, ese espacio estaba “diseñado para ser visto desde lejos”, lo que sugiere que se trataba de rituales públicos destinados a figuras de alto rango, como jefes o guerreros destacados. Entre los restos carbonizados se recuperaron objetos de vidrio finamente trabajados, láminas de oro que formaban parte de joyas con granates y piezas de juego que daban cuenta del estatus de quienes fueron homenajeados allí.
Pero eso no fue todo, a pocos kilómetros, en la zona de Viby/Norrtuna, los arqueólogos encontraron un túmulo que mezclaba tradiciones de la época de Vendel con elementos propios de la era vikinga. Ahí dieron con dos espadas que fueron enterradas verticalmente, con las hojas rotas por el impacto al clavarlas en la tierra.
Los arqueólogos describieron la escena como tan extraña como reveladora. En una de las tumbas había restos de un hombre y una mujer, lo que generó múltiples hipótesis sobre su relación: ¿eran pareja, familiares o parte de algún ritual de sacrificio? En contraste con la costumbre vikinga de doblar las armas antes de sepultarlas, estas espadas permanecieron erguidas, como un gesto simbólico de poder o de cierre de una línea guerrera.
Otro descubrimiento impactante en la zona
Otro descubrimiento impactante tuvo lugar en Sylta, donde un cementerio en uso entre los siglos IX y XII mostró la convivencia entre las creencias paganas y el avance del cristianismo. En casi treinta tumbas del siglo XI se hallaron caballos cremados junto a sus dueños, tanto hombres como mujeres, un hallazgo inusual que sugiere que la equitación y el prestigio no eran exclusivos del mundo masculino. Los animales estaban adornados con campanas, arreos de bronce y ornamentos de gran valor, lo que reflejaba el estatus de sus propietarios.
“Los yacimientos son fascinantes, pero el panorama general es aún más interesante”, expresó Fredrik Larsson, de Arkeologerna. “Tenemos un amplio estudio transversal que abarca varios distritos simultáneamente, lo que nos permite comprender cómo la sociedad y el paisaje cambiaron a lo largo de las generaciones”, cerró.
