Escapada al pueblito donde no hay ruido y celebra la Fiesta de la Torta Frita

El fin de semana largo está a horas de iniciar. La provincia de Buenos Aires tiene una amplia propuesta turística, gastronómica y de conexión con la naturaleza.

21 de noviembre, 2025 | 09.15

Los feriados de noviembre son la oportunidad para una escapada de fin de semana largo en la provincia de Buenos Aires, donde los turistas tienen muchas opciones para elegir entre pueblos, localidades y ciudades a pocas horas.

Uno de estos destinos está a orillas del Paraná. Se trata de Santa Coloma, en el partido de Baradero, que condensa la esencia del interior bonaerense con su aire sereno, caminos de tierra y una memoria que fue testigo de batallas, sueños y silencios.

¿Cómo nació Santa Coloma?

La localidad se encuentra a mitad de camino entre las ciudades de Baradero y San Antonio de Areco. Fue fundada en 1912, sobre las vías de lo que fue el ferrocarril Belgrano. En sus inicios fue denominada "parada km 128", desarrollándose el pueblo a su alrededor. 

La estación se encontraba en los campos de Don Carlos Santa Coloma, origen del nombre de la estación y del pueblo desde 1930. Santa Coloma, remonta su dinámica espacial a las primeras décadas del siglo XX, asumiendo desde su nacimiento y a través de su impronta histórico-cultural, características especiales que le dan un carácter natural, paisajístico cultural y patrimonial propio de ser protegido y conservado por lo cual es declarada Pueblo turístico y Paisaje Cultural.

Cómo es Santa Coloma

El camino hacia el pueblo se abre entre campos ondulados y eucaliptos que perfuman el aire con aroma seco y dulce. Hoy viven allí alrededor de 200 personas y la principal actividad es la agroganadera. Una de las celebraciones más importantes a escala nacional es la Fiesta del Mondongo y la Torta Frita.

Al caminar por allí, los turistas se pueden encontrar con casas de ladrillo antiguo, portones de hierro forjado y patios cubiertos de parras. Las plazas todavía conservan los bancos de cemento que llevan el nombre de las familias que los donaron, un gesto que revela el profundo sentido comunitario que define a la comunidad.

Hay viviendas particulares como "La Adelaida 1929", o una de las construcciones más antiguas donde funciono la Escuela N°22, hoy vivienda particular. El club, la capilla Santa Coloma, un conjunto arquitectónico como la estación del ferrocarril, hoy biblioteca y Centro Cultural, también comprende galpones y dos viviendas particulares.

El pueblo también fue elegido como residencia de importantes artistas plásticos y pintores que plasmaron sus diseños como la plaza Martin Fierro, diseñada por el artista plástico y arquitecto Luis Benedit, y una obra artística del pintor Rodolfo Ramos.

Durante los fines de semana, algunos habitantes abren sus puertas para compartir dulces caseros, embutidos y pan recién horneado. Cuando la localidad cumplió 100 años en 2012, los habitantes fundaron su museo para resguardar la memoria local.

La localidad se presenta como un lugar donde no hay ruidos, ni apuros, ni carteles luminosos. Hoy el pueblo trabaja en ampliar la oferta gastronómica, con las comidas típicas de la zona.