Tiene laguna y se puede llegar en tren: el pueblo a 2 horas de Buenos Aires que es ideal para una escapada familiar

Las vacaciones de invierno están a punto de llegar a la Provincia de Buenos Aires y por ende, muchas familias buscan opciones de escapadas baratas y cercanas para disfrutar sin alejarse mucho de la Ciudad. Precisamente, existe un pueblo que queda solo a 2 horas de distancia y al que se puede llegar directamente en tren. 

Se trata de San Miguel del Monte, la ciudad cabecera del partido de Monte, a la cual se puede llegar tranquilamente en transporte público para disfrutar de su amplia laguna y ambiente rural. Al encontrarse solamente a 110 kilómetros de Buenos Aires, está conectado a la red de transporte público y cuenta con una estación de tren activa.

Precisamente, se puede llegar desde Constitución tomándose el tren Roca y haciendo transbordo en Ezeiza y Cañuelas, allí hay que bajarse en la estación de San Miguel del Monte y desde ahí se puede recorrer el pueblo, disfrutar de su gastronomía e incluso aprovechar su laguna para vivir un día en familia rodeado de naturaleza.

Qué hacer en San Miguel del Monte

La costanera, iluminada al atardecer, se convierte en el punto de encuentro local: bares, parrillas, cafés y un paseo de artesanos dan un clima relajado mientras la laguna refleja colores, perfectos para disfrutar un mate, una cerveza o esperar el crepúsculo acompañados de vistas inolvidables. Ese es uno de los puntos más claves para disfrutar en San Miguel del Monte.

Para los amantes de la historia, el Museo Guardia del Monte ofrece un viaje al pasado: piezas del Fortín original, objetos personales y testimonios de la época de Juan Manuel de Rosas. Muy cerca se encuentra el Rancho de Rosas, vivienda original de Rosas construida en 1817 y trasladada íntegramente al casco urbano.

Otro punto destacado es la Parroquia San Miguel Arcángel, de estilo colonial ecléctico desde 1863, que guarda obras religiosas emblemáticas que remiten a la identidad espiritual del pueblo. En el casco histórico, el Palacio Municipal y la Plaza Adolfo Alsina conforman un circuito ideal para recorrer caminando mientras se respira la esencia de Monte