Estas son las prepagas que aceptan jubilados que no quieren afiliarse a PAMI

Te contamos qué dice la ley, cuáles son las prepagas que aceptan jubilados y cómo evitar que te cobren de más. Conocé tus opciones.

30 de diciembre, 2025 | 04.10

Llegar a la jubilación viene con muchos trámites y una creencia instalada: que automáticamente tenés que afiliarte al PAMI. Esto genera dudas, especialmente si toda tu vida adulta usaste una obra social o una prepaga

La realidad es que la afiliación al PAMI no es obligatoria por ley. Es un derecho que podés ejercer, pero también tenés la opción de elegir. Lo que sí es automático es la derivación de tus aportes previsionales hacia el organismo público cuando te jubilás.

Esto significa que, si no hacés nada, terminás en PAMI por defecto. Pero si vos querés mantenerte en tu cobertura médica actual, tenés que dar el paso y manifestarlo expresamente. El momento clave es antes de que se cierre el trámite de tu jubilación.

Una vez que aceptás el PAMI, la situación se complica. Perdés tu afiliación anterior y si después querés volver a una prepaga, el camino es más burocrático. Por eso es fundamental tomar la decisión con toda la información en la mano desde el principio.

Lista de prepagas que aceptan jubilados: conocé las alternativas para 2026

Si querés mantener la continuidad con tus médicos o acceder a una red amplia, las prepagas son una alternativa sólida. Varias compañías tienen planes diseñados o adaptados para la tercera edad. Acá te nombramos algunas de las principales que operan en el país.

  • OSDE es una de las más reconocidas, con una red de prestadores enorme en todo el país. Ofrece planes con coberturas específicas que se adaptan a las necesidades de las personas mayores, lo que la convierte en una opción muy buscada.
  • Swiss Medical se posiciona en el segmento premium y también cuenta con alternativas orientadas a adultos mayores. Tiene diferentes niveles de cobertura, lo que te permite elegir según lo que necesites y lo que estés dispuesto a pagar mensualmente.
  • Sancor Salud destaca por su fuerte presencia federal y su atención personalizada. Tiene planes específicos para la tercera edad y suele ofrecer opciones más económicas, aunque su cartilla puede ser más concentrada en el Área Metropolitana.
  • Otras opciones a considerar son Galeno, con una extensa red nacional y planes amplios; Alta Salud, con décadas de trayectoria y programas estructurados para jubilados; y SIPSSA, con base en Córdoba pero cobertura en todo el país.

Tus derechos como jubilado

Es frecuente que, al intentar afiliarte a una prepaga siendo jubilado, te encuentres con rechazos iniciales. Las empresas a veces ven a los adultos mayores como usuarios de alto costo por la demanda de servicios. Sin embargo, la ley es clara en este punto.

Vos tenés derecho a solicitar y sostener la afiliación en la entidad que elijas. Que una prepaga ponga trabas no quiere decir que sea legal. Incluso para ingresar por primera vez a una obra social o prepaga de grande, existen mecanismos que protegen tu elección.

Sí, es probable que te encuentres con valores más altos o evaluaciones de riesgo más estrictas. Pero el rechazo únicamente por tu edad no está permitido. Es importante que conozcas esto para no dar el brazo a torcer ante la primera negativa.

¿Y cómo se maneja el dinero? Los aportes que se derivan de tu jubilación a ANSES y luego a PAMI pueden redirigirse. Si elegís una prepaga u obra social, podés solicitar que esos fondos vayan hacia la institución privada que vos prefieras. Es un trámite, pero es tu derecho.

¿Te pueden cobrar cualquier precio por ser mayor de 60?

El miedo a que la cuota se vaya a las nubes es uno de los principales frenos. Sin embargo, la ley 26.682 de Medicina Prepaga establece límites muy claros para proteger a los afiliados mayores. No pueden cobrarte lo que quieran.

El artículo 17 determina que la cuota para el grupo etario más alto (generalmente mayores de 65) no puede superar tres veces el valor de la franja más baja. Esto pone un tope concreto a la diferencia de precios por edad.

Además, tenés otra protección clave. Si tenés más de 65 años y más de 10 años de antigüedad en la misma prepaga, la empresa no puede aplicarte aumentos por el solo hecho de cumplir años. Tu precio se actualiza por otros conceptos, no por edad.

Para los que tienen menos antigüedad, las prepagas sí pueden actualizar la cuota según la edad, pero siempre respetando los topes de la tabla oficial de la Superintendencia de Servicios de Salud. Cualquier aumento debe ser notificado con 30 días de anticipación.