Las milanesas son un ícono nacional, pero la versión a la suiza tiene un plus que derrite a cualquiera: queso, salsa blanca y gratinado al horno. Una fórmula irresistible que combina la crocancia de este plato con la cremosidad de una cobertura dorada. Desde Tucumán, Roxana Civallero comparte algunas recetas prácticas y deliciosas, y esta no es la excepción.
La milanesa, en cualquiera de sus formas, sigue siendo uno de los platos más elegidos por los argentinos. Ya sea en un bodegón, en casa o en versión gourmet, este clásico se reinventa con cada vuelta al horno.
Esta receta que comparte fusiona la tradición suiza del gratinado con la pasión argentina por la milanesa. Para los nostálgicos, recuerda a aquellas versiones de bodegón de barrio, como bien muestran documentales y series que rescatan la cultura popular de la mesa familiar.
Los ingredientes que necesitás para preparar la milanesa suiza fácil y en casa
Para 3 porciones, según la receta de Civallero vas a necesitar:
- 500 g de carne para milanesas (ella recomienda nalga).
- 2 cucharadas de mostaza.
- Un chorrito de leche.
- Sal, ajo y condimentos a gusto.
- 2 huevos.
- Pan rallado.
- Queso cremoso.
Para la salsa blanca vas a necesitar:
- 3 cucharadas de aceite de oliva.
- 2 cucharadas de harina.
- 1 taza de leche.
- Nuez moscada, sal.
Paso a paso: cómo se hace fácil y rápido
- En un bowl, mezclá los huevos con sal, ajo, 2 cucharadas de mostaza y un chorrito de leche. Sumergí las milanesas y dejalas marinar mientras preparás la salsa.
- Para la salsa blanca, colocá el aceite y la harina en una olla a fuego medio. Revolvé hasta formar una pasta y agregá de a poco la taza de leche, sin dejar de batir. Cociná hasta que espese y condimentá con sal y nuez moscada.
- Empaná las milanesas con pan rallado y freílas en aceite caliente hasta que queden doradas. Luego, colocalas en una fuente, cubrilas con queso cremoso y bañalas con la salsa blanca.
- Llevá al horno hasta gratinar y dorar bien el queso. Serví caliente y disfrutá este manjar con papas fritas, puré o una ensalada fresca.
Algunos tips clave para una milanesa a la suiza impecable
- Elegí una buena carne: la nalga es rendidora y tierna, pero podés usar bola de lomo o cuadrada. Pedí al carnicero que la corte fina.
- Marinar bien: el paso de dejar la carne en huevo, leche y mostaza potencia el sabor y la hace más tierna. Dale mínimo 30 minutos de reposo en heladera.
- Pan rallado fresco: si podés, rallá pan viejo. Le da mejor crocante que el pan rallado industrial.
- Salsa blanca sin grumos: sumá la leche tibia de a poco y revolvé siempre con cuchara de madera o batidor. La nuez moscada hace la diferencia.
- Queso generoso: no escatimes. Un buen cremoso o mozzarella de calidad derrite y gratina perfecto.
- Horno fuerte: para que el gratinado quede dorado, precalentá bien el horno y no tengas miedo de usar fuego fuerte unos minutos al final.