Vuelve la misa "prohibida" al Vaticano y festeja el "enemigo" número uno de Francisco

La ceremonia no se realizaba desde 2022, pero volverá este año para una importante peregrinación que se realizará en Roma.

16 de septiembre, 2025 | 15.40

El Vaticano autorizó a que se realice una misa tradicional, la cual no se celebra desde 2022 porque tiene que contar con un permiso especial de la Santa sede. Se trata de uno de los eventos más destacados desde que inició el pontificado del papa León XIV. Esta vez, la ceremonia será encabezada por el cardenal Raymond Leo Burke, conocido por ser opositor a las decisiones de Francisco.

La misa se celebrará en medio de la 14° peregrinación titulada Ad Petri Sedem, organizada por la asociación Popolo Summorum Pontificum, que se realizará del 24 al 26 de octubre en Roma y convoca a fieles, sacerdotes y religiosos de todo el mundo.

¿Qué es la misa tradicional y cuándo se realizará?

La misa tradicional se trata de una misa en latín que es celebrada por un obispo en la Catedral de la Basílica de San Pedro. Suele realizarse en el segundo día de la peregrinación y este año será el 25 de octubre. Burke será el encargado de oficiarla, al igual que en 2014.

Esta celebración, también es conocida como misa tridentina, misa en latín o la Forma Extraordinaria del Rito Romano, es la forma del rito de la Misa católica que fue la norma en la Iglesia Católica durante siglos.

Su nombre formal es el Rito Romano Tradicional. Fue codificada por el Papa Pío V en 1570, después del Concilio de Trento, y se mantuvo como la forma principal de la liturgia hasta la reforma litúrgica de 1969, posterior al Concilio Vaticano II. Se oficia en latín y el sacerdote celebra la misa "ad orientem" (hacia el este, de espaldas a los fieles).

La misa tradicional se trata de una misa en latín que es celebrada por un obispo en la Catedral de la Basílica de San Pedro

¿Cómo será la misa tradicional?

La peregrinación empezará el 24 de octubre con las vísperas pontíficias en la Basílica de San Loreno in Lucina, las cuales son presididas por el cardenal Matteo Maria Zuppi, quien es considerado progresista y cercano a las ideas de Francisco. El 25, la misa tradicional será precedida por una procesión de casi un kilómetro desde la Basílica de los Santos Celso y Juliano hasta la de San Pedro.

Para los tradicionalistas, se trata de un momento de gran importancia y para quienes luchan para que el rito tradicional pueda ser celebrado libremente por todos los sacerdotes que así lo deseen. Burke es uno de los más críticos del pontificado del papa Francisco y defensor de la misa tradicional en latín, según el cardenal esta celebración "cayó notoriamente en desgracia". Además, el último 22 de agosto tuvo una audiencia privada con León XIV