Se habla más de sexo, pero se previene menos: los números de infecciones de transmisión sexual que alarman

Una alarma que vuelve a poner el foco en la importancia de la prevención y de la necesidad de acercar más el sistema de salud a las y los jóvenes.

04 de diciembre, 2025 | 15.34

Según distintos sondeos, en la actualidad los jóvenes y adolescentes hablan más abiertamente de sexo y salud sexual en comparación con décadas anteriores. Sin embargo, el número de testeos de HIV tiende a la baja y las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) aumentan considerablemente en la región.

Estas cifras encendieron una alarma que vuelve a poner el foco en la importancia de la prevención, de la información para derribar mitos y de la necesidad de acercar el sistema de salud a las y los jóvenes.

Más se habla, menos se testea

La mortalidad del SIDA disminuyó en los últimos tiempos, pero los nuevos diagnósticos se mantienen altos en la franja etaria de los adolescentes y jóvenes. Se trata de un grupo que habla más y abiertamente de sexualidad, pero se testea menos.

Los últimos datos de UNICEF aseguran que 370.000 jóvenes de 15 a 24 años contrajeron HIV en el 2024 y que de ellos, 145.000 eran adolescentes de 15 a 19. Por otra parte los números de testeo en esta franja etaria son bajos y hasta en algunas regiones menos del 30% puede acceder a una prueba anual.

Según la Organización Panamericana de Salud (OPS) en América Latina un tercio de las personas con HIV se diagnostica tarde, cuando la infección ya es avanzada y decrecen las posibilidades de comenzar un tratamiento que resuelte eficiente.

Las ITS más frecuentes en Argentina

"El aumento de ITS se debe, entre otros factores, al inicio de las relaciones sexuales a edades tempranas, el uso inconsistente de métodos barrera y la falta de información clara. Hoy las infecciones más frecuentes en Argentina son Sífilis, Gonorrea, Clamidia, Herpes simple, Hepatitis B, Hepatitis C, HPV y HIV", explicó la infectóloga Ainoha Vilariño.

La doctora contó que el grupo joven "concentra gran parte de los nuevos diagnósticos. No necesariamente porque tengan más actividad sexual que otros grupos, sino porque se testean menos. Las mujeres jóvenes, especialmente durante los embarazos, suelen acceder más al sistema, por eso es fundamental promover el acceso al diagnóstico también entre varones adolescentes y jóvenes".

El preservativo peneano, vaginal o el campo de látex siguen siendo herramientas esenciales. "Su uso correcto, de principio a fin de la práctica sexual, con un preservativo nuevo si se cambia de práctica o pareja, reduce significativamente la transmisión de ITS. La profilaxis post exposición (PEP) y la profilaxis pre exposición (PrEP) constituyen herramientas clave adicionales para personas en riesgo, siempre bajo supervisión médica", sintetizó Vilariño.