Con el constante aumento del precio de la nafta, los conductores buscan maneras de hacer más eficiente el uso del combustible. Según un informe reciente, algunas técnicas de manejo lograron un ahorro de hasta un 40 por ciento. Estos trucos se vuelven claves, sobre todo en tiempos en que los presupuestos están ajustados por la crisis económica que vive el país.
Para lograr ese ahorro, el ritmo de conducción juega un papel fundamental. Se recomienda mantener una velocidad entre 90 y 100 km/h, ya que cada 10 km/h que se mantenga dentro de este rango puede suponer un ahorro del 9 por ciento en el consumo del tanque de nafta. Además, es crucial evitar maniobras bruscas como aceleraciones y frenadas repentinas, y en su lugar, utilizar el freno motor para desacelerar progresivamente.
Por otro lado, la manera en que se utilizan los pedales también influye. Hay que hacer uso adecuado de la primera marcha y procurar que las revoluciones se mantengan uniformes. Se aconseja presionar el acelerador con suavidad, ya que esto no solo contribuye al ahorro, sino que también prolonga la vida del vehículo. Además, tener un control sobre la velocidad de crucero y evitar dejar oprimido el pedal del embrague puede marcar una diferencia notable.
Las maniobras en curvas también requirieren atención; se sugiere tomarlas a una velocidad de entre 16 y 24 km/h. Pequeños cambios, como apagar el motor al detenerse, pueden contribuir al ahorro de combustible. Mantener la presión adecuada de los neumáticos y distribuir el peso de manera uniforme dentro del auto es igualmente importante. De hecho, transportar 100 kilos extras puede restar un 6 por ciento de rendimiento a vehículos medianos.
El truco japonés para limpiar el colchón sin agua
Limpiar la casa con regularidad es clave para mantener un ambiente armonioso y cuidar los muebles. Pero, hay espacios y objetos que requirieron un poco más de atención a la hora de sacar el polvo. Durante los días de frío, por ejemplo, se tiende a estar en casa más tiempo, especialmente en la cama, y eso significa que el colchón acumula más suciedad. Esto se convierte en un verdadero desafío, sobre todo en días de lluvia o temperaturas bajas, ya que es difícil limpiarlo sin mojarlo y dejarlo al sol.
Afortunadamente, hay un truco poco común, de origen japonés, que permite limpiar el colchón sin usar agua. Esto lo hace mucho más fácil para poder volver a usarlo rápidamente, sin esperar horas para secarlo. Aunque hay productos que prometieron una limpieza rápida, es preferible optar por ingredientes naturales para cuidar la vida útil del colchón y evitar químicos que pueden ser dañinos.
Este ingenioso método se basa en el uso de elementos cotidianos y técnicas de ventilación, y ayuda a eliminar ácaros, polvo y olores de forma definitiva, dejando el colchón completamente renovado. Para llevarlo a cabo, solo se necesita un ingrediente que todos tienen en la cocina: la sal gruesa. Este ingrediente actúa como un absorbente natural de humedad y olores. Solo hay que esparcir una capa gruesa de sal sobre el colchón y dejarla actuar durante una hora. Esto permite que la sal absorba efectivamente la humedad y los olores indeseados.
Luego de transcurrida la hora, se reta la sal del colchón, y para hacerlo, se puede utilizar una aspiradora o un cepillo de cerdas suaves. Este simple truco transforma un colchón en un espacio fresco y limpio, listo para volver a disfrutar del descanso.
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