Perplexity AI, una startup de inteligencia artificial radicada en Wall Street, lanzó una oferta sorprendente para adquirir Google Chrome, el navegador líder de Alphabet, por un monto de u$s34.500 millones. Aunque esta cifra está muy por debajo del valor que se estima para el activo, la propuesta representa un movimiento estratégico que podría cambiar el juego en la industria tecnológica.
El interés de Perplexity no es casualidad: bajo el mando de Aravind Srinivas, la empresa ya había intentado en enero una adquisición similar con TikTok US, buscando fusionarse para responder a las tensiones políticas y de propiedad que enfrenta la app china en Estados Unidos. Ahora, la mirada está puesta en Chrome, que cuenta con más de 3.000 millones de usuarios y es una puerta clave para potenciar su posicionamiento en la carrera por la inteligencia artificial.
Sin embargo, Google no planea desprenderse de su navegador. La compañía está enfrentando una sentencia judicial en Estados Unidos que la declaró monopolística en el área de búsquedas online, aunque planea apelar esa decisión. Por otro lado, el Departamento de Justicia estadounidense exige como medida correctiva que Google venda Chrome, lo que abre un escenario complejo y de gran incertidumbre para la industria.
Por el momento, Perplexity no aclaró cómo financiaría la operación, a pesar de que cuenta con el respaldo de inversores importantes como Nvidia y SoftBank, que le inyectaron cerca de u$s1.000 millones hace tres años. Actualmente, la valoración de la empresa ronda los u$s14.000 millones, por lo que la oferta supera ampliamente ese monto. Además, fuentes cercanas indicaron que varios fondos estarían dispuestos a financiar la compra, aunque no se revelaron sus identidades.
El protagonismo de los navegadores web crece en el contexto de la inteligencia artificial, ya que son la vía principal para acceder a búsquedas y datos de usuarios, elementos esenciales para el desarrollo de tecnologías con IA. Plataformas como ChatGPT y el propio Perplexity utilizan estos datos para ofrecer respuestas rápidas y precisas, por lo que controlar un navegador como Chrome es un activo estratégico.
Los planes de la empresa que quiere comprar Google Chrome
Perplexity ya lanzó su propio navegador con inteligencia artificial, llamado Comet, diseñado para ejecutar tareas automáticas para el usuario. Pero conquistar Chrome le daría un salto enorme para competir con gigantes como OpenAI, que también mostró interés en el navegador y desarrolla productos propios con IA.
Según una hoja de términos revelada, la propuesta de Perplexity incluye mantener el código abierto de Chromium, invertir u$s3.000 millones en los próximos dos años y conservar el motor de búsqueda predeterminado de Chrome. Además, como la oferta no contempla componentes de capital, se asegura la libertad de elección para los usuarios y se intentan mitigar futuras preocupaciones sobre competencia.
Este movimiento pone en jaque el dominio de Google en un sector clave y refleja la creciente influencia de las startups de inteligencia artificial en el mapa tecnológico global. La pelota ahora está del lado de Alphabet y de las autoridades regulatorias, que decidirán si esta millonaria oferta puede abrir una nueva etapa en la industria digital.