Mercedes‑Benz Argentina aplicó una nueva estrategia para su utilitario Sprinter en el mercado local, al pesificar formalmente su lista de precios, un movimiento que refleja la intención de reducir el impacto de la inflación y la volatilidad del dólar en los compradores.
Los valores de las Sprinter “nacionales” – aquellas producidas en la planta de Virrey del Pino– ahora oscilan entre $ 57.809.911 y $113.499.854, abarcando la gama que va desde la versión básica hasta la más equipada.
¿Por qué cambiaron los precios del Mercedes-Benz Sprinter en Argentina?
Los precios se cotizaban en dólares desde hace 20 años, lo que generaba una constante incertidumbre ante la devaluación que sufre el peso desde un tiempo. Con la conversión a moneda local, Mercedes‑Benz busca brindar transparencia inmediata al cliente, alineándose con una tendencia que otras automotrices también comenzaron a adoptar.
El esquema contempla versiones Furgón en diferentes longitudes de carrocería –3250, 3665 y 4325 mm entre ejes–, así como variantes mixtas y minibus, todas impulsadas por motores diésel de 2.0 litros, con potencias que van desde 114 hasta 170 caballos, según modelo.
La Sprinter nacional
La Sprinter es producida desde 2006 en Argentina en la planta de Virrey del Pino, partido de La Matanza, donde se ensambla tanto para el mercado interno como para el Mercosur y otros destinos de exportación. Desde allí se despachan vehículos completos y kits CKD, con una capacidad exportadora que abarca un 70% de la producción, enviando unidades a regiones como Australia, Sudáfrica y Nueva Zelanda.
En relación al equipamiento, las versiones base denominadas 311 o 314 incluyen prestaciones funcionales orientadas al trabajo intenso, mientras que los modelos superiores 414 y 517 ofrecen carrocerías más amplias, mayor capacidad de carga y confort, sin dejar de lado la robustez característica de la marca.
Las variantes mixtas y minibuses permiten transportar pasajeros, lo que amplía su vocación para fletadoras, transporte escolar o aplicaciones privadas. La renovada ficha técnica refleja un enfoque integral: calidad de construcción, versatilidad de uso y respaldo posventa.
El peso bruto total admisible de la Sprinter varía entre 3000 y 5000 kilos, y su capacidad interna puede alcanzar hasta 15,5 metros cuadradaos en las versiones XL, lo que la convierte en una opción recurrente para empresas de logística, transporte de cargas y servicios móviles.
La conversión definitiva a pesos implica que mejora la previsibilidad de costos para flotas y empresas; por otro, facilita las negociaciones de financiación y servicios posventa asociados, como las garantías y los planes de mantenimiento disponibles en concesionarios oficiales. El resultado es una Sprinter más accesible en términos de evaluación de costos totales .