Este sábado, mientras el Papa Francisco fue despedido en Roma, los reyes Guillermo y Máxima de Países Bajos celebraron el Día del Rey en Doetinchem, una ciudad llena de color y alegría. A pesar de la ausencia de la princesa Ariane, quien se encuentra en la recta final de sus exámenes en Italia, la Máxima Zorreguieta y sus otras dos hijas, Alexia y Amalia, deslumbraron con su estilo único y personalidad.
La reina Máxima lució un elegante y sobrio total look en azul marino, optando por la sobriedad en lugar de los tradicionales colores vibrantes que suelen caracterizar este día tan especial. Por su parte, sus hijas demostraron su individualidad con estilos totalmente opuestos. Alexia lució un look roquero con falda negra y una cazadora de cuero tipo birkin, mientras que Amalia sorprendió con un vestido de color azul celeste y una capa incorporada, luciendo muy regia y elegante.
El clima primaveral acompañó a la familia real durante todo el día, mientras recorrían las calles de Doetinchem junto a sus ciudadanos. Decenas de personas se acercaron para saludar y fotografiarse con las princesas, que derrocharon simpatía y se mostraron amigables con todos.
Durante su recorrido, la realeza neerlandesa pudo disfrutar de diversas actividades y espectáculos callejeros. También visitaron el Mark Tennatplantsoen, un parque en honor a los Calgary Highlanders, quienes participaron en la liberación de la ciudad durante la Segunda Guerra Mundial. Además, tuvieron la oportunidad de conocer una granja urbana y conversar con agricultores locales, donde probaron los productos típicos de la región.
Cabe destacar que la princesa Amalia, en agradecimiento a la cálida acogida que recibió en Madrid durante una época difícil para ella, visitó la ciudad a principios de mes para inaugurar un jardín de tulipanes en la Plaza de Oriente. Esta visita expresó su gratitud hacia la ciudad, que le brindó seguridad y protección cuando recibió amenazas en su país.
¿Quién es la prima bailarina de Máxima Zorreguieta?
Laura Viña, conocida por su carrera en el mundo del pole dance y su relación familiar con la reina de los Países Bajos, mantuvo una vida alejada del entorno protocolar en el que se encuentra Máxima Zorreguieta. A pesar de compartir un lazo familiar, ambas llevan vidas muy distintas. La fama de Laura Viña creció cuando la prensa descubrió su parentesco con la reina, lo que generó interés en su trayectoria y en la particular vida que llevó.
Nacida el 10 de junio de 1982, Laura Viña comenzó a ganar notoriedad como bailarina en la escena nocturna porteña. A los 18 años, enfrentó una situación personal difícil al quedar embarazada, lo que la llevó a tomar decisiones importantes en su vida. En ese momento, optó por trabajar como bailarina en un boliche conocido, buscando un empleo que le permitiera cuidar a su hija. Su ascenso en la escena del pole dance coincidió con la popularización de esta disciplina en los clubes nocturnos de Buenos Aires.
Con el tiempo, Laura Viña se consolidó como una de las bailarinas más destacadas de pole dance en la discoteca Shampoo, lo que la llevó a ser reconocida en los medios. Aunque no tiene un vínculo cercano con Máxima Zorreguieta, su conexión familiar llamó la atención de la prensa, destacando las diferencias entre sus respectivas trayectorias de vida.
El lazo entre Laura Viña y Máxima Zorreguieta proviene de sus abuelas, quienes eran hermanas. De esta manera, la madre de Laura, Mercedes Vigliarchio, es prima hermana de María del Carmen Cerrutti, la madre de la reina de los Países Bajos. Sin embargo, a pesar de este parentesco, no se ha conocido un contacto cercano entre ambas primas. Las vidas de Máxima Zorreguieta y Laura Viña han seguido caminos muy diferentes, con Máxima ascendiendo al trono como reina consorte y Laura desarrollando su carrera en el mundo del espectáculo.
La exposición de Laura Viña no se limitó a su trabajo en los clubes nocturnos. También tuvo participaciones en medios televisivos, siendo una de las figuras del ciclo de cocina hot de Nino Dolce en Playboy TV, donde interpretaba a "Mara". Esta participación le permitió expandir su presencia en la televisión y vincularse con el entretenimiento para adultos.
En 2005, debutó en el teatro formando parte del elenco de Marido 4x4, una comedia protagonizada por figuras como Emilio Disi, Susana Romero y Sergio Gonal en Villa Carlos Paz. En esta obra, Laura Viña interpretaba a una mucama, mostrando una faceta distinta de su carrera y ampliando su presencia en el mundo del espectáculo argentino.
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