Después de años de intentos fallidos, cancelaciones y obstáculos de producción, El Eternauta llegó finalmente a Netflix con una primera temporada que sacudió al público. Basada en la emblemática historieta de Héctor Germán Oesterheld y Francisco Solano López, la serie logró reinterpretar el clásico argentino con una impronta contemporánea, sin perder su espíritu original.
Con Ricardo Darín en el papel de Juan Salvo, y bajo la dirección de Bruno Stagnaro, la producción se posicionó rápidamente entre lo más visto de la plataforma. Pero más allá de su calidad visual y su fidelidad al relato, el final de temporada dejó a todos con una pregunta: ¿qué pasó realmente en los últimos minutos del último episodio?
¿Qué pasa en el final de la primera temporada de El Eternauta?
La primera temporada de El Eternauta está compuesta por seis episodios de entre 45 minutos y una hora. En ese tramo, seguimos el avance del grupo liderado por Juan Salvo en su intento de sobrevivir a una nevada mortal y a una invasión alienígena que avanza de forma silenciosa pero devastadora. Tras resistir un ataque en un shopping y encontrar refugio en Campo de Mayo, donde opera la “resistencia”, Salvo y su familia se suman a una misión clave: cruzar la ciudad para enviar un mensaje radial de alerta. Pero las cosas, como era de esperarse, no salen como lo planeado.
Durante ese trayecto, lo que parecía una historia de ciencia ficción posapocalíptica se transforma en algo más complejo y perturbador. En el episodio final, Lucas (Marcelo Subiotto), uno de los miembros del grupo, sufre un colapso psicológico y apuñala a Omar (Ariel Staltari). Mientras Favalli (César Troncoso) intenta socorrer al herido, Salvo persigue al atacante hasta una terraza, desde la cual se ve una inquietante luz azul que emana desde la cancha de River. Lucas, ya fuera de sí, dice: “Está relampagueando” y se lanza al vacío.
Poco después, la desconfianza dentro de la resistencia escala. Otros sobrevivientes comienzan a sospechar de Salvo y su grupo, creyendo que se pasaron al bando enemigo, lo que desata un nuevo conflicto. En un intento por buscar respuestas, Juan y Franco (Jorge Sesán) huyen en tren hacia la cancha de River, epicentro de esa luz desconocida. Desde lo alto de un edificio, Salvo tiene una revelación impactante: las imágenes fugaces que vio a lo largo de su travesía no eran alucinaciones, sino visiones del futuro. “Yo estuve acá antes. Esto ya lo viví”, dice.
Allí observan un ejército de humanos armados, incluidos algunos rostros conocidos, y una extraña figura humanoide con manos largas y múltiples dedos en el centro de la luz. “Ese es el verdadero enemigo”, dice Juan, y Franco completa: “Esa cosa los controla, son como robots”.
La escena final suma aún más inquietud. Juan tiene una visión de su hija Clara practicando tiro, a pesar de que él mismo le había prohibido usar armas. La expresión de la niña, sumada a otras señales previas, como sus lagunas mentales, sugiere que ella también podría estar siendo controlada.
El final de El Eternauta deja abiertas varias preguntas clave: ¿Qué es esa criatura que manipula a los humanos? ¿Cómo se formó ese ejército? ¿Favalli logró volver a Campo de Mayo? ¿Clara está perdida para siempre? El propio Ricardo Darín confirmó en una entrevista que la historia continúa y que se contará “de principio a fin”, pero aún no hay fecha confirmada para la segunda temporada. Lo que sí es seguro es que el conflicto apenas comienza.