Piden diez años de cárcel para un futbolista de Peñarol de Uruguay

Impacto en el fútbol argentino. El mediocamista fue futbolista de Estudiantes de La Plata, Talleres y Patronato. Está acusado de "abuso sexual con acceso carnal".

07 de noviembre, 2025 | 16.41

Un jugador de Peñarol podría enfrentarse a una condena de diez años de prisión por una causa de abuso sexual con acceso carnal. Se trata de Diego García, quien en febrero de 2021 cuando aún era jugador de Estudiantes de La Plata atacó a Clara B., una jugadora de hockey, en una fiesta organizada por sus compañeros en una casa en Abasto. La etapa de juicio oral comenzó el pasado 28 de octubre y finalizó este jueves en el Tribunal Criminal V de La Plata.

La víctima acudió rápidamente a la Policía y poco tiempo después radicó la denuncia en Tribunales, brindando detalles de todo lo sucedido. Tanto el abogado querellante Marcelo Peña como el fiscal Lucas Domsky solicitaron penas de prisión efectiva: mientras que la defensa pidió 10 años, el fiscal, que dio por probado el delito, exigió 8. El veredicto se dará a conocer el próximo 25 de noviembre y ambas partes solicitaron que el atacante uruguayo nacido en Salto quede inmediatamente detenido a pesar de que apele a la Cámara.

El testimonio del abogado Peña sobre el caso de abuso sexual de Diego García: "No hay forma de que no termine preso"

En diálogo con Infobae, Peña fue contundente respecto del desarrollo del caso: "No hay forma de que no termine preso. La declaración de la víctima fue contundente y también las pruebas que presentamos. Me llamó la atención que él ni siquiera se defendió, ni pidió perdón, nada: sólo les agradeció a los clubes que siguieron contratándolo", comentó.

Por otra parte, resaltó que, por pedido de la víctima y su entorno, buscará que la pena sea efectiva: "Para nosotros el caso está terminado. Tan así es el tema que tanto Clara como su familia rechazaron cerrar el juicio con una cuestión de reparación económica, algo que nos propusieron en muchas ocasiones y hasta en el inicio del debate. De hecho, ni siquiera se activó una demanda civil: ella no quiere plata, quiere Justicia".

La defensa del futbolista argumentó que la relación entre ambos fue consentida, aunque dos pruebas presentadas en el juicio oral refutaron rápidamente esta versión. La primera de ellas fue un audio que Clara B. envió a dos amigos solicitando auxilio y pidiendo que la busquen inmediatamente; la otra es una foto de uno de sus pómulos inflamados a causa de un golpe, evidencia de que fue sometida violentamente y contra su voluntad.

Marcelo Peña, abogado defensor, sobre la actitud de García durante el debate: "Sólo parecía importarle volver a jugar al fútbol".

"Los audios reflejan el estado de desesperación y angustia de Clara tras lo sucedido y la imagen de la lesión es contundente. Tan así es que también pedí el falso testimonio para dos testigos que intentaron desdibujar lo ocurrido y ni siquiera mencionaron el golpe", declaró Peña. Por su parte, el fiscal Domsky esgrimió en su alegato que "la mecánica del ataque fue clara: empujón, golpe, inmovilización, violación".

Además, la querella destacó la impasividad de García durante el debate: "Estuvo inmutable, no se le movió un músculo y sólo parecía importarle volver a jugar al fútbol", sostuvieron. Apenas se hizo pública la denuncia, Estudiantes activó su protocolo de género, apartó al jugador y lo transfirió poco tiempo después; el 'Demonio' recaló en Patronato, luego en Emelec de Ecuador y por último regresó a su país, primero para vestir la camiseta de Liverpool y en la actualidad la de Peñarol.

El pedido de condena toma mayor relevancia al producirse horas después de la consagración de Sebastián Villa en la Copa Argentina con Independiente Rivadavia de Mendoza. El extremo colombiano atravesó una causa por el mismo delito, pero finalmente la víctima decidió retirar la acusación.