El presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn, aseguró este jueves que el organismo tendrá mayor participación en el financiamiento de la Argentina, en el marco del programa de trianual de hasta 10.000 millones de dólares que anunció en abril. El BID, junto con el Banco Mundial y el Fondo Monetario, trabajan en coordinación con el Tesoro de Estados Unidos en un paquete de apoyo al gobierno de Javier Milei, por un monto de hasta 40.000 millones de dólares. En el caso del BID, su titular reconoció que en “la etapa que viene apunta a proyectos productivos y estratégicos con impacto en el crecimiento del país”. “Estamos trabajando en cómo cooperar en materia de infraestructura, cómo vamos a financiar a los productores de minerales críticos”, aseguró en una entrevista concedida a la agencia Bloomberg Línea.
En conversación desde su oficina en Washington, el economista brasileño recordó que el BID ya aprobó este año a la Argentina operaciones por unos 4.000 millones de dólares y que los próximos meses serán clave para acelerar la programación que se tiene con el país. Si bien Goldfajn aclaró que los montos que ya se han aprobado este año no implican desembolsos inmediatos, pues depende de la naturaleza de cada proyecto, anticipó un mayor ritmo durante 2026.
“El año que viene tenemos la idea de tener una programación significativamente más robusta de lo que tenemos este año en proyectos de inversión”, dijo Goldfajn en la entrevista. El primer anuncio formal del BID se realizó en abril. Allí se detalló que el organismo pondrá a disposición de Argentina hasta 10.000 millones de dólares en un plazo de tres años, incluyendo 7.000 millones de dólares en préstamos soberanos y 3.000 millones de dólares canalizados a través de BID Invest para fomentar la inversión privada.
Un plan crítico
Para el primer año del programa, se proyectaron 3.000 millones de dólares en financiamiento público y 1.000 millones de dólares para el sector privado, lo que coincide con las cifras que mencionó Goldfajn y consigna la nota de Bloomberg Línea. En ese marco, el presidente del BID subrayó que el trabajo conjunto con el país ya está en marcha y que la relación se ha enfocado en la agenda de reformas estructurales de la administración de Javier Milei, con la que se empezó hablar inicialmente de programas de eficiencia del gasto, de “una reforma fiscal interesante” y de una reducción en los subsidios.
La etapa que viene apunta a proyectos productivos y estratégicos con impacto en el crecimiento del país. “Ahora estamos trabajando ya en cómo trabajar infraestructura, cómo vamos a financiar a los productores de minerales críticos”, detalló. Por ello, la idea es asignar recursos a proyectos ligados a la expansión de la infraestructura, concesiones y el desarrollo de materias primas como el litio. “Ya estamos trabajando con recursos y proyectos que tienen que acelerar el crecimiento”, afirmó Goldfajn.
Como parte de este salvataje estadounidense, sobrevuelan los acuerdos por los minerales críticos y tierras raras. La administración Milei firmó el año pasado un Memorándum de Entendimiento con los Estados Unidos por la gobernanza de los minerales críticos y otro para obturar la presencia china en la Vía Navegable Troncal (la mal llamada Hidrovía) con la injerencia del cuerpo de ingenieros del Ejército norteamericano sobre el río Paraná.
El apoyo del BID se suma al paquete de medidas que busca el gobierno de Milei, desde el programa con el Fondo Monetario Internacional hasta los recientes anuncios hechos por Estados Unidos. Esta misma semana, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, confirmó que se está negociando una nueva línea de crédito de 20.000 millones de dólares para Argentina. Esta iniciativa se presentaría como un complemento del swap de igual monto ya vigente con bancos privados y fondos soberanos.