Expectativa en el Norte Grande: Fermosa Biosiderúrgica completó el 60% de su ejecución y prevén pruebas en diciembre

El proyecto industrial estratégico combina tecnología sustentable, genera empleo local e impulsa la producción de arrabio verde que generará crecimiento económico en la regional.

17 de julio, 2025 | 10.00

La Planta Fermosa Biosiderúrgica se consolida como una iniciativa clave para el desarrollo industrial del norte argentino y ya alcanza un 60% de su ejecución. Con más del 70 % de la obra civil ya concluida, el proyecto no sólo promete generar miles de puestos de trabajo directos e indirectos, sino que también impulsa a pequeñas y medianas empresas locales y posiciona a la provincia como un nuevo polo siderúrgico con proyección regional y nacional.

Desde su lanzamiento en 2022 el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, lo presentó como una apuesta estratégica al desarrollo productivo del norte. A la fecha se completaron estructuras fundamentales como el silo de carbón, la plataforma de operación del horno, sistemas de ventilación, intercambiadores de calor, sistemas de lavado de gases y las bases de la cinta transportadora principal. Además, se avanza en el montaje de la sala de control, desde donde se gestionará la producción a través de un centro operativo centralizado.

Uno de los aspectos distintivos del proyecto es su enfoque sustentable, gracias a la tecnología de ciclo cerrado que permitirá una operación eficiente y con emisiones reducidas. En este sentido, la planta tendrá una capacidad de producción de 144.000 toneladas anuales de arrabio verde, lo que reducirá la dependencia de importaciones y fomentará el perfil exportador de la provincia. La inversión inicial de 65 millones de dólares podría traducirse en ingresos anuales estimados en 155 millones de dólares.

Infraestructura en marcha y proyección industrial

Durante 2025 se completó la estructura de soporte que integrará una torre superior de 15 metros, y corona el alto horno. También se avanzó en el sistema de preparación de carga, que incluye la tolva giratoria que se instalará en la cima del horno para recibir el material desde los silos y cintas transportadoras. Ya se montaron los tres primeros segmentos del horno y se instalaron la parte superior, los sistemas de carga, la chimenea y los ciclones de limpieza.

La obra cuenta con la participación de más de 80 trabajadores formoseños. En el silo de carbón se finalizó la última losa y ya comenzó la etapa de mampostería, mientras que el decantador registra un 80 % de avance, con tareas de hormigonado activas. También se ejecutan trabajos en las bases de los glendos, clave para calentar el aire que ingresa al horno, y en la sala de máquinas se levantaron tres bases para ventiladores, con mampostería ya al nivel del techo.

En la sala continua, destinada a los transformadores, la losa fue finalizada. Simultáneamente, se trabaja en las torres que contendrán el mineral de hierro, las cuales serán ensambladas al muro de contención. Durante las próximas semanas se espera el arribo de más de 20 camiones provenientes de Brasil con piezas fundamentales para la etapa final del montaje. Entre estos componentes se encuentran estructuras para tolvas, sistemas de aire caliente y materiales refractarios, esenciales para completar el horno y la cinta transportadora principal. Si las condiciones climáticas lo permiten, las primeras pruebas técnicas podrían desarrollarse en diciembre, lo que marca un hito en la industrialización formoseña.

Parque Carbonífero: la clave para la producción

En paralelo con la planta, avanza la construcción del Parque Industrial Carbonífero en la localidad de Los Matacos, una obra central para garantizar el suministro de carbón vegetal. Allí se montan 320 hornos, de los cuales seis ya se encuentran habilitados. Se estima que el parque cubrirá entre el 40 y el 50 % de las 90.000 toneladas anuales necesarias para el funcionamiento de la planta.

El diseño de los hornos incorpora tecnología específica para la combustión eficiente de leña de vinal, una especie autóctona y abundante que permite aprovechar recursos locales con bajo impacto ambiental. Esta producción se inserta en una estrategia integral de desarrollo que articula infraestructura, tecnología e industria, con fuerte participación de las comunidades regionales.

Cabe señalar, que el impacto laboral del proyecto será significativo con una estimación de 3.000 puestos de trabajo entre empleo directo e indirecto, y abarca operarios, técnicos, personal logístico y de transporte. La participación de empresas formoseñas proveedoras, como Canavesio, encargada de pilotes e infraestructura metálica, potencia a las pymes regionales y dinamiza la economía local. Además, el transporte de materiales desde Brasil y la producción agroindustrial del carbón vegetal amplían las oportunidades para pequeños productores y transportistas.