Luego de tratar de "mentiroso" en pleno recinto al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, la senadora nacional por Tierra del Fuego Cristina López pidió su renuncia al afirmar que "le quedó grande el cargo". Además, calificó como "una falta de respeto" que el funcionario decidiera no asistir este miércoles al Congreso y le exigió dar "un paso al costado".
"Francos debe renunciar, le quedó grande el cargo", afirmó López en declaraciones a la prensa. La senadora planteó que si el funcionario "no está dispuesto a rendir cuentas y sale corriendo del recinto cuando le dicen la verdad en la cara, entonces que dé un paso al costado y se vaya a su casa". Y arremetió: "Le quedó muy grande el cargo de jefe de Gabinete".
La semana pasada, el ministro coordinador había ido a la Cámara alta para presentar un nuevo informe de gestión del gobierno de Javier Milei, pero se retiró cuando la senadora López, al exponer sus preguntas, le dijo "mentiroso". "Le repito lo que le dije la semana pasada cuando salió corriendo del recinto: me voy a retractar únicamente cuando el presidente Milei haga lo mismo y deje de faltarle el respeto a Tierra del Fuego y a todos los argentinos", planteó.
En ese sentido, López lamentó su faltazo porque le hubiera permitido "decirle en la cara que le quedó grande el Informe de Gestión". "Tan grande le quedó, que en un momento llegó a decir que los argentinos vamos hacia un 'futuro de pobreza'. ¿Qué clase de jefe de Gabinete dice eso con tanta naturalidad?", se preguntó.
Francos tenía que volver pero argumentó "compromisos" previos
El ministro debía volver este miércoles para continuar con su informe, pero avisó que no podrá concurrir por tener "compromisos contraídos con anterioridad". "Si el Congreso les parece un trámite innecesario, entonces lo que me queda grande a mí no es la banca", señaló la senadora fueguina.
También cuestionó las declaraciones en las que el ministro calificó a los informes de gestión ante el Congreso como "una pérdida de tiempo". "Para los libertarios, o los traidores como Francos, rendir cuentas al Congreso es una pérdida de tiempo, porque la democracia es una molestia", señaló.
Además, la dirigente peronista criticó que el funcionario la haya tildado de "violenta" por sus cuestionamientos en pleno recinto. "Violento es que los jubilados tengan que elegir entre comer, medicarse o prender la estufa porque hace 10 grados bajo cero en Tierra del Fuego. Violento es aplicarles la motosierra a los discapacitados, a la salud, a la cultura, a la educación, a la ciencia. Violento es que el presidente al que Francos responde nos llame ratas, delincuentes, imbéciles, degenerados y mandriles", enumeró.